En medio de la polémica conformación de la directiva de la Asamblea Legislativa para la legislatura 2018 – 2019, la diputada de la opositora Unidad Demócrata (UD) Jimena Costa denunció una cadena de irregularidades que se cometen en ése órgano por el oficialismo y la oposición, entre ellas el acoso político, validación de ítems fantasmas, extorsión y suplantación de identidad.
Todo detonó cuando su frente no alcanzó consenso para nominar al jefe nacional de bancada en Diputados. Un bloque respaldó al diputado Gonzalo Barrientos y otro a Norman Lazarte.
La legisladora denunció que este último fue legalmente designado pero que, tras presiones principalmente ejecutadas a legisladoras mujeres, se gestó el planteamiento de Barrientos de forma “extemporánea”.
“La persecución, las amenazas, el obligar sobre todo a las diputadas a que retiren su firma para apoyar a Barrientos son unas prácticas de la política que se deben desterrar de este parlamento. El número ya no cuenta cuando obligan a los diputados y hacen bajo presión que apoyen al uno o al otro”, reclamó Costa en la acalorada sesión que se instaló la tarde de este viernes para ese fin.
Acusó a los senadores Arturo Murillo, Óscar Ortiz y “sus esbirros” de tomar las decisiones en ese frente. “Tiene que hacerse una modificación al reglamento de esta cámara porque tiene que haber sanciones duras y expresas por el acoso político”, sostuvo.
En medio del debate que duró algo más de tres horas que luego derivó en las aplazamiento de la sesión preparatoria para este sábado, la diputada Fernanda San Martín ratificó la denuncia planteada por Costa y denunció “presiones y amenazas para retirar su voto”. “No voy someterme a intentar taparle la corrupción a ningún colega de la oposición”, sostuvo.
Otra denuncia está referida a la existencia de ítems fantasma para habilitar a supuestos funcionarios del Legislativo que cobran, pero no laboran en ése órgano. “(Hay) funcionarios fantasmas que firman o ponen la huella (dactilar) antes de irse a otros trabajos. Son prácticas, lamento decirlo, que no es solo de la oposición, son prácticas dentro del sistema”, reveló Costa.
Además, denunció el cobro irregular de comisiones o coimas a los empleados para mantener sus cargos. “Hay extorsión a los funcionarios que les quitan parte del sueldo, ojalá hubiese sido solo Barral. No es así, no se atreven a denunciar porque necesitan el trabajo”, señaló.
Su colega Amílcar Barral había sido suspendido temporalmente del cargo por una denuncia pública planteada por uno de sus subalternos y que justamente se refería a ese tipo de cobro.
También está la suplantación de identidad. “En esta misma sesión se ha reconocido que se manda a firmar a nombre de los diputados, hay AGP (Apoyo a la Gestión Parlamentaria o asesores) que circulan con los sellos de los diputados y que firman en su nombre Es un delito”, remarcó.
Por último, acusó a algunos diputados de contratar a sus parientes, pedir licencias prolongadas con bajas médicas consecutivas y, además, reclamó a la presidenta de Diputados, Gabriela Montaño, por la “explotación laboral” que se ejerce en contra de los colaboradores de los legisladores a quienes no se les paga las horas extras cuando laboran en las prolongadas sesiones de ese órgano.
Justamente Montaño, quien lamentó la fragmentación de la oposición, salió al frente de las denuncias y en una conferencia de prensa demandó a los opositores pruebas o información sobre todos los hechos denunciados.
“He pedido que cualquier información de algún diputado de la oposición sobre ítems fantasma o cobros irregulares, que la hagan conocer y nosotros vamos a hacer la investigación, y por supuesto que tampoco no vamos a tolerar que se acose a diputadas”, señaló y dijo que el actual reglamento de esa instancia es suficiente para luchar contra esos ilícitos. (19/01/2018)