El ministro de Gobierno, Carlos Romero, reveló que entre las personas que lo amenazaron en redes sociales está un periodista, pero evitó dar más detalles y dio por cerrado el caso que desató una polémica tras la amenaza que no prosperó de un proceso legal a los autores.
Las amenazas e insultos se dieron a propósito de la relación del acusado por narcotráfico Pedro Montenegro y jefes policiales. El 12 de diciembre Romero anunció la presentación de una denuncia en calidad de víctima, y al día siguiente la Fiscalía perfiló la citación a cuatro personas.
“Este es un tema que yo lo estoy dando por cerrado, no voy a tocar el tema solo que me ha sorprendido que uno de los anónimos resulta ser un periodista, lo tomo simplemente como una anécdota, cierro el tema y no me voy a referir más”, afirmó en una rueda de prensa en la que dijo que decidió dejar de lado la denuncia.
El recurso tecnológico de la geolocalización, dijo, permitió dar e identificar con los responsables de los anónimos. No quiso ahondar en más detalles porque advirtió “componentes políticos y distorsiones”.
La Fiscalía había iniciado con la investigación por la presunta comisión de delitos informáticos y en contra la dignidad de las personas. Incluso ya se tenía previsto citar a las cuatro personas implicadas.
“A mí me pueden observar, me pueden criticar y tengo que aceptar las críticas con humildad, me pueden juzgar desde el punto de vista del trabajo que realizamos y tienen derecho a hacerlo, cualquier persona puede hacerlo, inclusive me pueden insultar, los insultos no los respondemos”, sostuvo.
El caso de Montenegro generó una serie críticas contra Romero por el tiempo que el narcotraficante había estado operando con jefes de la Policía en Santa Cruz. De hecho demandaban su destitución, pero el presidente Evo Morales determinó que su situación no estaba en debate. (15/05/2019)