El abogado y candidato Carlos Alarcón presentó este jueves cinco ‘variables’ que, en criterio de Comunidad Ciudadana (CC) de Carlos Mesa, muestran la existencia de fraude electoral. A través de una muestreo y comparación de la fotografía de las actas y de las actas del cómputo oficial determinaron cómo se incrementó el caudal de votos del Movimiento Al Socialismo (MAS).
Con imágenes de actas, mostró que en el primer caso CC registra 44 votos en el acta fotografiada para la transmisión preliminar de resultados, pero ese número reduce a 39 en el acta parte del cómputo oficial. En la segunda variable, se mantienen los 57 votos de CC, pero lo 4 del MAS suben a 104 en el acta del cómputo oficial.
En la tercera variable de irregularidades, según explicó, se detectó que se incrementó los votos a CC y al MAS, pero obviamente en mayor número al oficialismo con la idea de “simular o disimular un menor impacto en la alteración de datos”. El cuarto caso hace referencia a la detección de 74 actas con mayor número de votos a los inscritos.
“Esos votos que hay en exceso no lo van a atribuir a nosotros sino al MAS”, explicó, mientras que el quinto hecho hace referencia a una sumatoria equivocada de resultados de las actas.
Las actas muestran una asignación correcta de votos a las diferentes fuerzas políticas, pero la sumatoria es superior a los votos emitidos. “Este exceso de votos en el resultado, que no coincide con los votos válidos han tenido que ser asignados a una fuerza política…al MAS”, insistió en una conferencia de prensa.
Todos los datos irregulares identificados ponen en duda, dijo, 109.277 votos. “Probablemente hay mucho más, este es el rastrillaje que hemos hecho al día de hoy”, añadió, y reiteró que este es un elemento para respaldar la exigencia de una segunda vuelta.
Los delegados de mesa no detectaron las irregularidades, pero la anulación de las actas debió ser de oficio, durante la revisión y conteo en cada uno de los tribunales electorales, explicó Alarcón y reconoció que ya es imposible pretender un cambio en las actas, tomando en cuenta que cada acto electoral “precluye”.
Movilizaciones en diferentes ciudades de Bolivia exigen se vaya a un balotaje, independientemente del resultado oficial, que al momento da como ganador en primera vuelta a Evo Morales. El propio Mesa exige la segunda vuelta.
Los resultados del trabajo de "rastrillaje" serán enviados a las misiones de observadores y al Tribunal Supremo Electoral (TSE).