Este martes retornó la violencia al centro de La Paz. Cerca de las 19.00 se enfrentaron con palos y piedras, en medio de la detonación de cachorros de dinamita, sectores afines al oficialismo y quienes exigen la renuncia del presidente Evo Morales y pretendían entrar a plaza Murillo, universitarios y médicos. La Policía intervino varios minutos después y tendió un cordón de seguridad entre ambos bandos.

Los enfrentamientos se dieron a un par de cuadras de la plaza Murillo, centro del poder político, que desde hace varios días es resguardado por sectores sociales que defienden a la actual administración de Gobierno, como los mineros. Un grupo numeroso se enfrentó a la cabeza de los médicos y universitarios que marcharon hasta ese lugar llevando banderas bolivianas.

Una persona que no pudo ser identificada se puso al medio de ambos bandos, pero sus ruegos incluso de rodillas no evitaron el enfrentamiento. Desde el bando de los afines al oficialismo lanzaron piedras y golpearon con palos a sus ocasionales adversarios, logrando que retrocedieran una cuadra.

Jóvenes que participaron de la protesta tomaron el liderazgo, luego de marchar desde el Monoblock de la Universidad Mayor de San Andres (UMSA). Estaban munidos de escudos hechos de calaminas y otros materiales y contraatacaron lanzando piedras a los sectores sociales movilizados, que se replegaron tras la intervención policial.

El foco del conflicto estuvo en la calle Yanacocha y Mercado. La Policía intervino varios minutos después de los enfrentamientos con el uso de agentes químicos y chorros de agua del carro antidisturbios Neptuno. En un primer momento no lograron dispersar a los jóvenes que hicieron una fogata y a momentos intentaban retomar su objetivo de ingreso a plaza Murillo.

La detonación de cachorros de dinamita por algunos instantes los hacía retroceder, pero no los alejaba de su punto de concentración. Pasadas las 20.00 los policías tomaron el control del lugar, pero los movilizados se ponían a buen recaudo y volvían a reagruparse para arremeter contra los uniformados.

En la avenida Camacho, como ocurrió el jueves 31, se concentraron los movilizados que buscaban algún lugar para ingresar hasta la plaza Murillo. Los policías estaban desplazados en diferentes puntos en un importante número e hicieron uso de agentes químicos para dispersar y persuadir cualquier intento de retoma del objetivo de llegar al centro del poder político. (05/11/199