“Él era alegre”, contó Ayda, la hermana de Limbert Guzmán Vásquez, el joven de 20 años que murió en los enfrentamientos del miércoles entre sectores que apoyan al Gobierno y grupos de personas que exigen la renuncia del presidente Evo Morales, en el puente de Huayculi, Quillacollo, en el kilómetro 11 de la avenida Blanco Galindo de Cochabamba.
La mañana de este jueves, en la zona Villa Ánimas de Alto Cochabamba, su padre y algunos parientes instalaron el velorio en medio de lágrimas y consternación y con un solo pedido: justicia.
Según contó su hermana, Limbert salió hace una semana y desde entonces apareció muy poco por casa.
“Ha llegado, después le he dicho ‘no vayas a eso, cómo vas ir’; le he dejado, ‘cocinate hijo, hay carne’, le he dicho y se había salido, de ahí no ha llegado. He ido a buscar a las Heronías (una avenida en Cochabamba), no entraba (la llamada) a su celular ¿Dónde voy a buscar? He llorado nomás”, contó su padre a la red Unitel.
Ahora está inconsolable. Lo crío solo desde muy pequeño tras el fallecimiento de su esposa.
“Ayer me llamó de otro celular, ‘aquí estoy en Huayculi’, me ha dicho. Ya vente, le he dicho”, contó y luego reclamó que “tiene que haber justicia”.
Tres varones y una mujer están en celdas policiales a la espera de las pesquisas y de las acciones que asuma el Ministerio Público por este hecho. Fueron capturados por los bloqueadores y llevados hasta las dependencias de la Estación Policial Integral (EPI) Norte después de golpearlos.
En un video que circuló en las redes sociales se los ve maltrechos en un vehículo. Uno de sus captores los acusa de haber matado al joven a palos, pero para ese entonces el joven no estaba muerto, sino gravemente herido.
La senadora del MAS Carola Arraya pidió esperar los resultados de la investigación y deslizó que existen versiones que dan cuenta que el joven operaba pirotecnia y que fue en ese marco que se lesionó.
Limbert fue trasladado hasta el Hospital Viedma donde le diagnosticaron un cuadro de paralasis cerebral. Luchó por su vida y sobrevivió a un paro cardiaco, no pudo con el segundo y falleció a las 20.45.
“Existen abundantes indicios de que estas personas son con probabilidad autores de este lamentable hecho. Lamentablemente el muchacho ha sido vilmente agredido, golpeado con piedras, palos y no se puede tolerar este tipo de actos tan violentos”, señaló el abogado de la familia, Libio Flores, al referirse a las personas que fueron entregadas a la Policía.
El presidente Evo Morales, a través de Twitter, expresó su pesar por el trágico desenlace.
Ayda Guzmán contó que la víctima estudiaba en el colegio Félix Capriles de Cochabamba, que estaba en la promoción y que soñaba con ingresar a la carrera de ingeniería civil. Era el segundo de tres hermanos. “Mi papá está muy dolido”, dijo.
Confirmó que “salió hace una semana y la última vez que se comunicó con mi papá fue ayer por la mañana y solo le dijo que estaba bien”.
A decir del abogado de la familia, “se ha avanzado bastante con la acumulación de indicios y pruebsa” y se espera que la mañana de este jueves el caso sea derivado a Quillacollo, donde ocurrió el hecho.
“Estamos planteando la denuncia por el delito de homicidio y pedimos a la Policía que cumpla con su trabajo porque esto no puede quedar impune, la vida es un valor supremo”, dijo el jurista.
Ayda no pudo hablar más, al igual que su padre, y se limitó a decir: “Pido que solucionen todo, hay tantos muertos, que la muerte de mi hermano no quede impune, quiero justicia”.
La jornada de violencia en Cochabamba terminó con la vida de Limbert y dejó al menos 89 heridos. (07/11/2019)