Comunarios que rechazan las medidas de presión contra el Gobierno tomaron la noche del jueves las válvulas de la represa Escalerani, que suministra agua a los distritos 1 y 2 de Cochabamba, es decir, al centro y sur de la urbe.
Ante este hecho, el Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado Sanitario (Semapa) activó un plan de contingencia “para garantizar el abastecimiento” del líquido.
“Para ello se han establecido medidas a corto y mediano plazo, con el objetivo de tomar acciones para responder a este tipo de sucesos”, reseña un comunicado que la proveedora publicó en sus cuentas en redes sociales.
El gerente de la firma, Luis Prudencio, confirmó ese extremo en una rueda de prensa y anunció que dos contingentes policiales se dirigieron al sector “para poder evaluar la situación y entablar la conversación con los comunarios para ver si se puede llegar a un buen acuerdo”.
Aunque dijo desconocer los motivos, el funcionario atribuyó la protesta a los conflictos sociales que golpean al país por las denuncias de supuesto fraude en las elecciones presidenciales que dieron como vencedor al presidente Evo Morales.
“No hemos tenido ninguna comunicación con los pobladores, pero por los conflictos sociales es lógico que es por ese tema”, señaló. Antes había dicho que “ese tipo de amenazas se han dado desde un principio, pero lamentablemente se han concretado anoche”.
Anunció que la primera medida fue reducir el caudal de 150 litros por segundo a 80 litros por segundo en la planta Taquiña con el fin de garantizar el abastecimiento.
“Semapa garantiza el suministro del agua potable a toda la población”, remarcó. (08/11/2019)