García: ‘Sería generar otra vuelta de tuerca a la ilegalidad’ de convocarse a elecciones por decreto
Álvaro García negó que se estén manejando las protestas en diferentes lugares de Bolivia desde México, donde está exiliado junto con el expresidente Evo Morales. A la par del exmandatario, el exvicepresidente descartó su participación en las elecciones próximas.
Álvaro García Linera se declaró "vicepresidente en exilio" y aseguró que cualquier decreto que el gobierno de Jeanine Áñez apruebe para convocar a elecciones generales será ilegal. Demandó que se deje trabajar a la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para convocar a nuevos comicios.
"Unas elecciones convocadas por decreto sería una ilegalidad y sería generar otra vuelta de tuerca a la ilegalidad", afirmó en el programa "Aristegui" de la periodista Carmen Aristegui en la cadena CNN.
"Estamos dispuestos a apoyar en la Asamblea Legislativa como corresponde para un nuevo calendario electoral que no debería tardar más de 15 o 20 días, y luego la convocatoria a elecciones por la Asamblea (…) si en medio aparece un decreto… un decreto está por debajo de una ley, está subordinado a la fuerza de una ley. Nuestra recomendación es que no sigan pisoteando la Constitución, que la Asamblea trabaje y haga la convocatoria a nuevas elecciones", sostuvo.
Se declara como "Vicepresidente en el exilio" porque su carta de renuncia no fue leída ni aprobada en el Legislativo.
Nueve días después de dimitir al cargo, junto al expresidente Evo Morales, García advirtió que en Bolivia puede pasar desde una confrontación civil hasta encontrar acuerdos.
"Ojalá que más pronto que tarde sepamos encontrar los acuerdos en la Constitución, nuevas elecciones, nuevo Órgano Electoral, investigación de los asesinatos de Sacaba y garantías a todas las personas".
García remarcó que ni él ni Evo pretenden ser candidatos y pidió garantías para tener una actividad normal en Bolivia, de retornar al país de su exilio en México.
Ante anuncios de que si retornan al país habrá procesos en su contra, respondió que Áñez es responsable de al menos 24 muertes, al igual que los comandantes de la Policía Boliviana y de las Fuerzas Armadas. "Se han manchado las manos de sangre, no lo hagan más", dijo.
Descartó, como denuncia el Gobierno y legisladores que respaldan al nuevo gobierno, que estén coordinando desde México las movilizaciones en rechazo a Áñez, quien asumió el poder bajo la figura de ausencia de los mandatarios y de los presidentes del Legislativo.
"Hay un quiebre moral de las clases populares que ven cómo sus derechos quieren ser pisoteados, derechos conquistados en estos últimos 13 años (…) No es una convocatoria que haga Evo. En las movilizaciones no están los dirigentes que tienen vínculos con nosotros, han desaparecido, hay dirigentes que están emergiendo, con otro tipo de espíritu, se asemejan a un levantamiento indígena campesino más que a una movilización dirigida, coordinada o digitalizada desde el exterior", insistió. (19/11/2019)