Para el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, los policías no se amotinaron durante los conflictos desatados en demanda de la renuncia de Evo Morales porque de hacerlo hubieran salido y metido bala. Eso no ocurrió y, por el contrario, “todo –dijo- ha sido en paz, en armonía”.
También descartó que el gobierno de Jeanine Áñez trate la demanda de jubilación con el 100% del salario en la Policía porque es un tema delicado y que debe ser tratado por el próximo gobierno elegido en las urnas el 3 de mayo. Sí, dijo, se trabaja en un incremento salarial.
“No se amotinaron los policías, los policías se replegaron. Se replegaron, ellos dijeron no vamos a actuar en contra de nuestros pueblo y se metieron a sus cuarteles, me pareció lo más correcto. Amotinamiento es que salgan, metan bala, algo así, no ha habido eso, todo ha sido en paz, en armonía”, dijo en una entrevista en Fides.
Los policías de la Unidad Táctica de Operaciones (UTOP) de Cochabamba se amotinaron la tarde del 8 de noviembre. “Los compañeros se han amotinado pero son una parte”, sostuvo uno de los policías con el rostro cubierto. Esa acción se irradió a diferentes unidades no solo de Cochabamba sino de todo el país.
Los uniformados se atrincheraron y protestaban en sus cuarteles y en otros casos participaron de marchas. Dos días después del 8 de noviembre, Evo Morales renunció presionado por el motín policial, la sugerencia de renuncia del entonces alto mando militar, el bloqueo cívico y las denuncias de fraude electoral en las elecciones del 20 de octubre.
Murillo explicó que el gobierno de transición de Áñez no puede tratar un tema tan delicado como la demanda policial de jubilación con el 100% del salario, como ocurre en las Fuerzas Armadas, aunque dijo que la propuesta es interesante bajo la premisa de que no debe haber discriminación.
“El pueblo dijo: la Policía ha hecho buen trabajo, hay que felicitar a la Policía, aumento de sueldo para la Policía, estamos trabajando en aquello, totalmente correcto, totalmente justo”, anunció.
La demanda policial fue tratada y aprobada en uno de los cabildos cívicos de Santa Cruz. El entonces líder cívico Luis Fernando Camacho dijo que el gobierno que suceda al de Morales debe atender el compromiso asumida.