La presidenta Jeanine Áñez cambió de forma sorpresiva al comandante del Ejército general Willy Pozo y posesionó en su lugar al general Rubén Salvatierra, mientras que ratificó al resto de las autoridades militares que formaban parte del Alto Mando Militar.
“Este cambio al que hoy hemos procedido responde a una atribución privativa de la capitán general de las Fuerzas Armadas. El cambio efectuado se hizo en pleno respeto y observancia de la jerarquía militar”, explicó Áñez en el acto celebrado en Palacio de Gobierno.
El general de División Carlos Orellana Centellas fue ratificado como comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, en tanto que el general de División Aérea Pablo Arturo Guerra Camacho permanece en el cargo de Jefe del Estado Mayor.
El general de División Aérea Ciro Orlando Álvarez Guzmán continúa al frente del Comando General de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) y el contralmirante Moisés Orlando Mejía Heredia fue ratificado como Comandante General de la Armada Boliviana.
Áñez agradeció al general Pozo por su labor y sostuvo que la designación del nuevo Comandante respeta la jerarquía y las promociones dentro de lo que establece la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas. (4/03/2020)