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Ministro Murillo se reunió y amenazó a Valenzuela, encarcelado por el caso Respiradores

Dos meses antes de destaparse el caso Respiradores, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, se reunió y amenazó con cárcel a Fernando Valenzuela, exasesor jurídico del Ministerio de Salud e involucrado en la investigación, por contactos que mantenía con gente del expresidente Evo Morales.

La revelación surgió del rastreo de llamadas y mensajes al móvil de Valenzuela, presentados ayer en conferencia de prensa por Murillo y el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), coronel Iván Rojas. En el seguimiento se halló contactos con el exmimistro Marcelo Navajas, la exministra Gabriela Montaño y su hermano Rodrigo.

Justamente de la recuperación de los mensajes se descubrió que Valenzuela le escribió el 3 de marzo a Rodrigo Montaño: “Hermano, estoy jodido, han intervenido mis teléfonos. Tienen sospechas jodidas que sigo ayudando y en contacto con ustedes. El otro día tuve una reunión con Murillo que me amenazó con cárcel”.

Montaño le respondió: “Y… sabíamos que podía pasar, no sé cómo es tu situación, pero creo que hay que organizar las alternativas de salida”.

Valenzuela fue aprehendido el 19 de mayo y el 24 fue enviado a la cárcel junto a Navajas y Giovanni Pacheco, de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico (Aisem).

Es uno de los principales involucrados en la denuncia de compra irregular de los 170 respiradores españoles. El fiscal Omar Mejillones informó el miércoles que, de acuerdo con las pesquisas, existió un sobreprecio de más de $us 3 millones y el “proceso de contratación está totalmente viciado”.

También están entre sus contactos el cónsul en Barcelona Alberto Pareja, que tiene detención domiciliaria, y Luis Fernando Humérez, quien fue presentado en un principio como “testigo clave” y que ahora está en la cárcel junto con el resto de involucrados.

No pudieron recuperar los mensajes del detenido con la exministra Montaño porque —según Rojas— utilizaban Telegram u otras aplicaciones en sus conversaciones y solo hacían timbrar sus celulares para el contacto. Hubo tres contactos detectados. “En fecha 19 de mayo horas antes de ser aprehendido se da una conversación a horas 13.16 por 16 minutos”, sostuvo Rojas.

Similar trabajo se hizo con el celular de Humérez, el que fuera considerado testigo clave en el caso que derivó en la destitución y encarcelamiento del exmimnistro Navajas, quien ahora está con detención domiciliaria.

De acuerdo con los datos, aunque ya se había hecho público el 3 de junio, conversó vía teléfono con el expresidente Evo Morales y dirigentes del Movimiento Al Socialismo (MAS), como el representante de los cocaleros del Chapare, Andrónico Rodríguez.

FLUJO. A diferencia de Valenzuela, en estos casos solo se informó del flujo de llamadas. De acuerdo con el reporte, entre el 1 de enero y el 19 de mayo hubo 5.800 llamadas entrantes y salientes.

Llamó a Morales en 19 oportunidades y recibió 10 llamadas del exmandatario, quien se encuentra refugiado en Argentina tras su dimisión en noviembre 2019.

En la lista también figuran la gobernadora de Cochabamba, Esther Soria; el exministro de Salud Aníbal Cruz, a quien llama en 76 oportunidades; y Saúl Lara, exministro en el gobierno de Carlos Mesa; y el exministro Carlos Romero, encarcelado por el caso UELICN.

A partir de los datos expuestos, Murillo dijo: “En mi criterio, después de haber visto este estudio, en lugar de ser un caso de corrupción es conspiración contra el gobierno de Jeanine Áñez”.
Cuando se destapó el caso y se conoció a los implicados, autoridades del Gobierno cuestionaron el porqué no se había retirado a personal que trabajó con el MAS como Valenzuela, quien estuvo trabajando con Montaño.

Montaño se refirió a denuncia

La gran estafa de los respiradores que no sirven para terapia intensiva y al cuádruple del precio tiene a altas autoridades a la cabeza: Ministro Navajas, el «embajador» Mostajo y el Director de AISEM, Pacheco y el cónsul Pareja. No son funcionarios medios