El Gobierno le pide a Sanders no usar a Bolivia como ‘carne de cañón’ en su disputa con Trump
Siete senadores demócratas estadounidenses se habían declarado alarmados el martes por el “creciente número de violaciones de derechos humanos” en el gobierno de Jeanine Áñez.

A través del embajador en Estados Unidos, el gobierno de Bolivia respondió al senador Bernie Snaders sus alusiones a la administración de Jeanine Áñez. Le pidió no usar el nombra del país en su disputa electoral con el presidente candidato Donald Trump.
“No es justo que usted use a Bolivia como carne de cañón en su lucha contra el presidente Trump. Somos un pequeño país que hace unos pocos meses demostró al mundo el ejemplo más claro de transición pacífica”, escribió Wálter Óscar Serrate, que firmó como embajador de Bolivia en Estados Unidos una carta de cuatro páginas.
El martes, siete senadores demócratas estadounidenses, entre ellos Sanders, se declararon “alarmados por el creciente número de violaciones de derechos humanos y la restricción de derechos civiles realizados por el gobierno interino” de Áñez, en una carta publicada en el sitio electrónico de la Red Andina de Información (AIN, por sus siglas en inglés).
Serrate plantea una serie de preguntas a Sanders cobre su “enojo y juicio erróneo” sobre la realidad de Bolivia. “¿Será porque el pueblo boliviano no aceptó un régimen socialista indefinido y rompió con Cuba? ¿No acepta que Bolivia tenga derecho a defender su Constitución y que prohíba reelecciones ilimitadas? ¿No se informó que el expresidente Evo Morales al que está defendiendo ahora, también era líder permanente de los productores de coca que proporciona la materia prima para la cocaína que está destruyendo familias en Estados Unidos?”.
“¿Acaso no se enteró del gigantesco fraude cometido durante las elecciones del año pasado, según lo verificado por la OEA, así como certificado por la mayoría de los países del mundo? ¿No leyó sobre las múltiples violaciones a los derechos humanos a los derechos humanos en nuestro país, que sufrió bajo un régimen sin estado de derecho, con un sistema de justicia destruido y utilizado con fines políticos?”, complementa Serrate.
En la carta de Sanders y sus correligionarios Christopher Murphy, Patrick Leahy, Benjamin Cardin, Tim Kaine, Chris van Hollen y Edward Markey, consideraron que “los informes de abusos se han acelerado recientemente con acciones enmarcadas como respuestas a la pandemia de COVID-19 que se usan para intimidar y socavar a los adversarios políticos del gobierno interino”.
Detallaron cinco puntos: “el uso de autoridades interinas para perpetuarse en el poder”, “acciones militares para intimidar” a la Asamblea Legislativa, “represión violenta e impunidad justo después de tomar el poder”, “violaciones contra las libertades civiles realizadas bajo el pretexto de la crisis COVID-19” y “tratamiento injusto y peligros de personas bolivianas privadas de libertad en medio de la pandemia”.
“Por favor, no induzca a otros senadores a alinearse contra Bolivia”, reclamó Serrate en el final de su carta dirigida a Sanders, influyente senador demócrata que a mediados de abril de este año suspendió su campaña de precandidato para respaldar la postulación de Joe Biden en su periplo electoral contra Trump en las elecciones de noviembre.
El senador Sanders ya había cuestionado la llegada de Áñez al poder en noviembre del año pasado. En distintos foros había considerado que el llamado de las Fuerzas Armadas a Morales a renunciar implica un «golpe de Estado».
Áñez sucedió a Morales luego de su renuncia, el 10 de noviembre del año pasado. Una movilización cívico-política, el pedido de renuncia del entonces comandante de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, y denuncias de irregularidades de la OEA en las elecciones del 20 de octubre habían precedido ese desenlace.
(09/07/2020)