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Evo Morales: ‘Pensé en tirarme monte adentro, selva adentro, para gobernar’

Asilado en Argentina desde pocos días antes de la Navidad de 2019, el expresidente Evo Morales recogió las frases atribuidas a Tupac Katari para titular su nuevo libro de memorias, “Volveremos y seremos millones. El golpe de Estado, el exilio y la lucha para que Bolivia vuelva a gobernarse”, en el que cuenta especialmente las memorias de su salida del poder.

Extractos del documento han sido publicados por el periodista Fernando Molina en el diario El País y por el portal Infobae, que en algunos casos fueron contados por el exmandatario en México y luego en Argentina.

Morales, ahora jefe de campaña del Movimiento Al Socialismo (MAS) y envuelto en un sonado caso de presunto estupro en el país, cuenta detalles de su salida y su situación actual, como la de sus correligionarios o el país.

Antes de renunciar el 10 de noviembre de 2019, el entonces mandatario se encontraba acorralado por una protesta cívica liderada por Luis Fernando Camacho y Marco Pumari, a los que se sumaron cívicos de otras regiones del país. Al final, fueron contabilizados 21 días de “resistencia”.

“Antes de renunciar, bien lo medité. Pensé en tirarme monte adentro, selva adentro para go­bernar”, dice en el libro publicado por editorial Planeta, en Argentina.

Sin embargo, afirma que finalmente decidió un día antes de su renuncia tomar la determinación. Dijo que temió de una masacre, que iba a dejar decenas de muertos y que por ella iban a culparlo.

“Al día siguiente, la acción tan natural del movimiento campesino, de muchos sectores sociales, podría haber sido tomar el Palacio, la plaza Murillo. Y no sé si la gente civil de la derecha habría disparado, tal vez algunos sí, pero la Policía sí habría metido bala y el resultado habría sido una masacre”, cuenta.

“Yo evalué profundamente esto y no puedo ser responsable de una masacre. Informé a mis ministros, a mis compañeros, para evitar esa masacre, mejor renunciar, no por cobarde, sino por cuidar la vida. Repito: ni un muerto a bala durante el conflicto. Siempre hemos recomendado a la Policía cuidar las vidas, no disparar”, insiste Morales.

“Entonces dormí con la conciencia tranquila, la decisión de renunciar era un buen cálculo para evitar una masacre”.

Al día siguiente, 10 de noviembre, muy temprano se supo del informe preliminar de la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre las elecciones del 20 de octubre. La conclusión fue que hubo serias irregularidades en el proceso, que ponían en tela de juicios los resultados.

La tarde de ese día, en conferencia de prensa, el comandante de las Fuerzas Armadas, William Kaliman, dio la sugerencia final: “Ante la escalada de conflictos que atraviesa el país y velando por la vida, la seguridad y la garantía del imperio de la Constitución, en conformidad al artículo 20 de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas, y luego de analizar la situación conflictiva, sugerimos al Presidente del Estado que renuncie”, dijo acompañado del Alto Mando militar.

“Las Fuerzas Armadas fueron las últimas en ‘sugerir’ mi renuncia, en conferencia de prensa”, cuenta Morales en el libro.

A partir de ese momento, el país se encontró en situación de incertidumbre. Uno a uno renunciaron quienes podían continuar en el gobierno por sucesión constitucional: el vicepresidente Álvaro García Linera, la presidenta de la Cámara de Senadores, Adriana Salvatierra, y el titular de la Cámara de Diputados, Víctor Borda. Además, el primer vicepresidente de la Cámara de Senadores, Rubén Medinacelli. Todos del Movimiento Al Socialismo (MAS).

“Hasta que llegó el Golpe. Y llegó ese día, bueno, llegó la recomendación de compañeros: Evo, tienes que abandonar acá, te van a matar”, dice Morales.

Ya en México Morales, tomó el poder “ipso facto”, como decía el comunicado del Tribunal Constitucional, la entonces segunda presidenta de la Cámara de Senadores, Jeanine Áñez, de la alianza Unidad Demócrata (UD). Se había proclamado primera titular del Senado y luego mandataria en sendas sesiones que no pasaron de los 10 minutos.

Como para argumentar el título del libro, Morales dice: “Mientras tenga la vida, seguiré en política, seguirá la lucha por la democracia… Me da orgullo haber cumplido. Tenemos lindo plan para continuar”.

(30/08/2020)