La Aduana recibió este miércoles 300 vehículos incautados por las Fuerzas Armadas al contrabando en zonas de frontera. El presidente Luis Arce destacó el papel de los militares en la lucha contra “este flagelo” y advirtió que los propios bolivianos “están matando la generación de empleo” al comprar productos importados, entre ellos de contrabando.
“Sin querer los bolivianos estamos matando nuestra propia generación de empleo porque en el momento que nosotros consumimos productos importados estamos dando empleo a quienes producen en esos países y estamos quitando empleo a las familias bolivianas”, lamentó en un acto desarrollado en Oruro.
Mucho de los productos importados ingresa por contrabando, lo que representa un doble problema para la economía, no paga impuestos y compite de forma desleal con los productores nacionales. Lo que se hará es reducir al mínimo los trámites para los importadores y en el otro frente se fortalecerá la lucha contra la internación ilegal de mercancías y materia prima.
Arce aseguró que en Bolivia hay condiciones para producir materia prima y productos acabados, por la calidad de la mano de obra.
“Hemos planteado con claridad que la manera más rápida de salir de este problema económico en el que nos ha dejado el gobierno de facto es producir pero producir fundamentalmente sustitutos de importación”, explicó.
Las Fuerzas Armadas, con la reactivación del Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando, retomaron la lucha contra el contrabando que había sudo descuidada en el gobierno de la expresidenta Jeanine Áñez. Este miércoles entregaron a la Aduana 300 motorizados incautados.
Arce lamentó que familias en zonas de fronteras estén encubriendo las actividades ilegales y atacando a las fuerzas que combaten los ilícitos. Aseguró que los militares tienen el respaldo del Estado para continuar con sus tareas.
(16/12/2020)