René Sanabria, el general destacado y encarcelado en EEUU por narcotráfico
Fue trasladado a Bolivia tras cumplir con su condena por narcotráfico. En menos de 20 años, se convirtió en uno de los agentes más respetados del país y en menos de dos días su imagen fue destruida

Este miércoles retornó a Bolivia el general retirado de la Policía René Sanabria Oropeza, tras cumplir parte de su condena por narcotráfico en Estados Unidos. El 24 de febrero de 2011, en Panamá, fue arrestado, acusado de traficar 144 kilos de cocaína desde Bolivia hasta Estados Unidos.
Hasta ese momento era director del Centro de Inteligencia y Generación de Información (Cegein), dependiente del Ministerio de Gobierno. Es un hombre de contextura delgada, de tez morena, de baja estatura y carácter estricto, la firmeza de su personalidad.
Era conocido por una carrera proba en la Policía Boliviana, hasta ese febrero de 2011. Ganó un cupo en la Escuela Nacional, ahora Anapol, y en 1977 fue uno de los más destacados de su promoción.
Desde entonces pugnó por ascender hasta llegar a general, distinguiéndose por su aplicación y alta moral. Luego del incidente que lo llevó tras las rejas, uno de sus compañeros, el coronel retirado Rolando Fernández aseguró que las referencias que tenía de Sanabria eran la de “un hombre intachable”.
En menos de 20 años, se convirtió en uno de los agentes más respetados y un “policía serio que gozaba de prestigio”, por sus múltiples méritos y logros, especialmente en la lucha contra las drogas. Esa imagen fue destruida en menos de dos días.
“Era un hombre consecuente con su trabajo, con una carrera muy limpia, no conozco una sola denuncia en su contra, pero lamentablemente nos hemos encontrado con esta desgraciada sorpresa. Dicen que la peor corrupción es la del mejor hombre, y él era considerado el mejor hombre”, declaró Fernández a un diario cochabambino en el 2011.
El 8 de enero de 2007, la entonces ministra de Gobierno Alicia Muñoz posesionó a Sanabria como titular de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) y en menos de medio año de gestión logró incautar 14 toneladas de cocaína.
A la conclusión de su gestión, había superado las 600 toneladas de droga incautada, la mayor parte marihuana, y había capturado a más de 6.000 personas involucradas en la producción y venta de droga.
Eso le valió su ratificación. En 2008 duplicó la incautación de cocaína a 28 toneladas; su premio en esa gestión, fue convertirse en general y ocuparse del control moral de la Policía, como jefe del Tribunal de Disciplina.
Condenó a los jefes policiales que negaron apoyo a sus camaradas en el linchamiento de Episana y pasó a retiro a casi un centenar de sus colegas involucrados en hechos delictivos.
En 2009 pasó a ‘servicio pasivo’, para luego ser invitado a hacerse cargo de la Cegein a partir de enero por el entonces viceministro de Defensa Social Felipe Cáceres.
La función del Cegein era realizar contrainteligencia en tareas antidroga y de desarticular redes de corrupción en la Justicia, el Ministerio Público y la Policía.
En 2011, el ya prestigiado general (r), exjefe antidrogas y miembro del Centro de Inteligencia y Generación de Información (Cigein) del Ministerio de Gobierno, iba a concretar un negocio de $us 5,6 millones por el envío de 2,8 toneladas de cocaína al mercado de Miami, Estados Unidos.
La Razón replicó en febrero de 2011 una información que fue difundida por el diario chileno El Mercurio. En esa se indicaba que Sanabria tenía previsto cobrar alrededor de $us 2.000 por el traslado de cada kilo de 2,8 toneladas de cocaína cuyo destino era Estados Unidos.
El 19 de agosto de 2010, según un reporte policial, Sanabria viajó a Arica, Chile, junto al coronel Milton Sánchez Pantoja, comandante del Distrito Policial 4 de la zona Sur de La Paz, con el objetivo de concretar el negocio del envío de 144 kilos de cocaína a Miami, vía Panamá, a bordo de un contenedor. En ese viaje, el exgeneral recibió $us 75 mil, como adelanto. Ambos transitaron en bus, para no despertar sospechas.
Sanabria realizaba el trato con una pareja que aparentaba ser un matrimonio que tenía conexión con grupos de narcotraficantes en Miami, pero que en realidad eran agentes encubiertos del OS-7 de los carabineros chilenos, quienes trabajaban en estrecha relación con personeros de la DEA norteamericana.
Según el informe de El Mercurio, Sánchez tenía conocimiento cabal sobre bandas mafiosas y circuitos de tráfico de drogas en la región.
Sanabria y Sánchez, tras su llegada a la Terminal de Arica, tomaron un taxi para llegar a un hotel lujoso de la ciudad chilena. Allí se encontraron con la pareja de supuestos narcos, con quienes debían cerrar el trato del envío de los 144 kilos de droga.
Después de almorzar, todos se fueron a una habitación para cerrar trato. “Parecía un escenario seguro para Sanabria y Sánchez. Pero la realidad era otra. Desde el cuarto contiguo, como en una producción cinematográfica, la cita era monitoreada mediante micrófonos por un grupo de expertos del OS-7”, relata la nota de El Mercurio.
El operativo concluyó con la detención del general en retiro Sanabria y Foronda Azero, en Panamá, el 24 de febrero de 2011, luego de que los agentes encubiertos y la DEA hicieron un seguimiento de los 144 kilos de cocaína que fueron enviados, desde Bolivia vía Arica, en un contenedor con rocas de zinc. Posteriormente, los dos capturados fueron enviados a Estados Unidos.
Los delitos por los que se acusó a Sanabria fue la vulneración del título 21, secciones 963 y 952 de la ley de Estados Unidos.
Según expuso entonces, el fiscal federal Brian Dobbins, el exgeneral boliviano estaba vinculado con traficantes colombianos que tenían que repartir los cargamentos de droga, que transportaba desde Bolivia, en distintas ciudades de Estados Unidos.
La Fiscalía estadounidense reveló que Sanabria y sus cómplices fueron acusados de poseer varias propiedades y cuentas bancarias por un total de medio millón de dólares, así como $us 560.000 que habrían obtenido a través de las operaciones ilícitas. Estas cuentas estaban registradas a nombre de supuestas empresas, en un banco cuestionado por la justicia estadounidense que suele ser utilizado para el lavado de dinero. La Fiscalía de EEUU solicitó el decomiso de esas cuentas.
Sanabria fue trasladado hasta La Paz y enfrenta un proceso por narcotráfico.
(06/01/2021)