La madrugada de este sábado, la expresidenta Jeanine Áñez fue trasladada de forma sorpresiva de la cárcel de Obrajes, en la zona Sur de La Paz, a la de Miraflores. “Me sacaron diciéndome que iba a la Clínica del Sur”, informó escuetamente a su ingreso al penal miraflorino.
A la 01.09 salió del Centro de Orientación Femenina de Obrajes y fue subida a una vagoneta, mientras que algunas personas que hacían vigilia le expresaban su apoyo: “¡Fuerza Jeanine, estamos contigo!”.
Unos 15 minutos después llegaba a Miraflores. Ninguna autoridad explicó el motivo del traslado de la acusada en el caso “golpe de Estado”. Su defensa intentó el viernes, sin resultados, viabilizar una autorización para que sea internada en la Clínica del Sur debido a problemas de salud por la hipertensión que padece.
A pesar de que ganó un recurso de Acción de Libertad, no logró su propósito. La Procuraduría General del Estado observó la autorización para su salida de la cárcel, lo que derivó en un cambio de la decisión judicial.
Según parte de los argumentos de la Procuraduría, el juez debe “corroborar” el reporte del estado de salud de la expresidenta con un informe del IDIF y no de una clínica privada.
“En atención al informe de la Directora del COF de Obrajes de la fecha y los informes médicos adjuntados al mismo, se dispone que personal del IDIF Especializado y/o personal médico especializado de un hospital público se constituya al COF de Obrajes a verificar el estado de salud de la imputada”, sostiene la resolución judicial,que “deja sin efecto el oficio de salida judicial”.
Áñez y sus exministros Álvaro Coimbra y Rodrigo Guzmán comparecerán este sábado en una audiencia de apelación a su detención. Los tres fueron remitidos a la cárcel en marco del caso “golpe de Estado”, que busca establecer responsabilidades en la renuncia del expresidente Evo Morales en noviembre de 2019.