El ministro de Relaciones Exteriores, Rogelio Mayta, consideró este viernes que en noviembre de 2019 hubo una “articulación internacional oculta y subterránea” que ayudó a consolidar el gobierno de Jeanine Áñez tras la renuncia de Evo Morales, asfixiado por denuncias de presunto fraude electoral, protestas cívicas, un motín policial y una “sugerencia” militar para que deje el cargo.
“En noviembre de 2019 hubo una articulación internacional oculta y subterránea para apoyar a consolidar el gobierno de facto de Jeanine Áñez a través de la represión violenta a la protesta social sin importarle que estaban cometiendo delitos de lesa humanidad en ese proceso”, dijo Mayta en una entrevista con La Razón Radio.
Estas apreciaciones de la autoridad gubernamental surgen después de que en pasadas semanas se conoció que el gobierno de Áñez se había prestado gases lacrimógenos de Ecuador y también se reveló ayer que Argentina había enviado a Bolivia “material bélico de agentes químicos”.
Pero, apenas “tenemos la punta de la madeja (…) y acá, por los elementos objetivos (que hay) y por la relación de las fechas, parece coherente pensar que el nivel de coordinación, para que llegue todo ese material (de Argentina) y otro de Ecuador, empezó a realizar alrededor del 10 de noviembre (día de la renuncia de Morales) o tal vez unos días antes o tal vez unas horas después”, calculó.
No obstante, remarcó que, aunque todavía queda por investigar cuándo exactamente y cómo habría surgido esa “articulación internacional”, es un hecho que hubo una coordinación “absolutamente irregular para que lleguen pertrechos por debajo de la mesa, sin que sepa la opinión pública de ninguna forma”.
“Y eso nos indigna y también nos preocupa porque este nivel de articulación internacional no es sencillo (de realizar) y la única referencia histórica que tenemos es el denominado Plan Cóndor de los gobiernos militares que compartían Inteligencia y compartían recursos en los procesos para aplastar al movimiento popular que ellos consideraban como enemigo interno, (entonces) esto parece ser una reedición (del Plan Cóndor) versión Siglo XXI”, indicó.
En la misma línea, horas antes, el expresidente Evo Morales consideró que estos envíos a Bolivia son una “evidencia innegable de la reedición del Plan Cóndor”.
“Esta es una prueba más de la participación de algunos gobiernos de derecha de Sudamérica en el cruento golpe de Estado que derivó en masacres y saqueo en nuestro país. Es la evidencia innegable de la reedición del Plan Cóndor con intercambio de información y sistemas de represión”, expresó Morales a través de su cuenta en Twitter.
El Plan Cóndor era un sistema de coordinación represiva en los países del Cono Sur que operó en la década de los años 70 hasta inicios de los años 80 para perseguir y eliminar a militantes políticos, sociales, sindicales y estudiantiles.