García dice que Mando de las FFAA de 2019 se incrimina con orden de salir a las calles sin aval civil
“Esta es la nota de su autoincriminación, ellos actúan como fuerza deliberativa, por encima del mando civil, eso es un golpe militar”, sostuvo el exvicepresidente durante una entrevista en Piedra, Papel y Tinta.
El exvicepresidente Álvaro García advirtió este martes que los comandantes de las Fuerzas Armadas se incriminaron con la orden del 11 de noviembre de 2019 de sacar unidades militares para “pacificar el país” sin una orden del Órgano Ejecutivo, desobedeciendo leyes militares y la propia Constitución que implica una sanción penal de al menos 10 años.
García dijo en entrevista con La Razón en el programa por streaming Piedra, Papel y Tinta que el 11 de noviembre, a través de un comunicado de la Dirección de Comunicación de las FFAA, el “Mando Militar” tomó la decisión de movilizar unidades.
“Quiero mostrar otro documento del 11, del día, no de la noche, otro comunicado de prensa del Comando en Jefe, del lunes 11, que dice: Las Fuerzas Armadas comunican que el Mando Militar, no dice el Ministro de Defensa, nosotros ya habíamos renunciado, pero no se había leído la renuncia en la Asamblea; el mando militar tomó la decisión, no dice el Ministro, no dice Evo Morales, de movilizar nuestras unidades para pacificar Bolivia”, detalló la exautoridad.
“Esta es la nota de su autoincriminación, ellos actúan como fuerza deliberativa, por encima del mando civil, eso es un golpe militar”, continuó García.
Uno por uno, el exvicepresidente, desglosó los artículos que contenía el comunicado de prensa en el cual se cita el artículo 244 de la Constitución Política del Estado (CPE); el artículo 6 incisos d) y g), artículo 8 inciso b) y artículo 57 inciso b) de la Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas (LOFA).
Según García, los comandantes del Ejército Pastor Mendieta, de la Fuerza Naval Flavio Arce y de la Fuerza Aérea Gonzalo Terceros, más el comandante en jefe de las FFAA, Williams Kaliman, desacataron la Constitución al momento de movilizar al Ejército para conservar el orden público sin requerimiento del Órgano Ejecutivo.
“El artículo 8 (inciso b) dice que el Presidente y el Capitán General de las Fuerzas Armadas dispondrán el empleo de las fuerzas militares para: en lo interno mantener el orden público cuando las instituciones legalmente constituidas para este fin resultaren insuficientes. ¿Quién decide eso? El Presidente y el Capitán General de las Fuerzas Armadas, no decide el Mando Militar. Su ley les dice que esas decisiones las toma o el Ministro de Defensa o el Presidente del Estado”, apuntó.
“Estos señores del Mando Militar golpistas están ahora bajo la Ley LOFA y el Código Penal Militar cuyo artículo 70 señala que el que realice levantamiento de las Fuerzas Armadas, el investirse del cargo para el cual no ha sido designado será sancionado con dos a diez años en tiempo de paz y el doble en estado de guerra. Es decir, si nos apegamos a su Código Penal y la LOFA estos insubordinados mínimo tienen la posibilidad de tener una sentencia de diez años”, advirtió.
Para García, los militares no pueden tomar decisiones de apaciguar, pacificar o proteger por cuenta propia. “Eso es deliberación y está sancionado por el Código Penal Militar y la Constitución. El mando civil decide eso, el Ministro o el Presidente”, remarcó.
Luego, la exautoridad precisó que los militares intentaron blindarse demandando de Jeanine Áñez, que había asumido el poder, un Decreto Supremo para operaciones militares.
El exvicepresidente dijo que lo central de la insubordinación fue el despliegue de los aviones K8 en Challapata sin orden previa y un segundo apunte sobre un comunicado, del mismo 10 de noviembre, sobre la decisión del “Mando Militar” de ordenar la ejecución de operaciones militares y terrestres para “neutralizar grupos armados que se encuentran actuando fuera de la ley”.
“Esta es la primera prueba del golpe militar (…) ordenan operaciones militares”.
Avión Presidencial
García dijo que las Fuerzas Armadas, el 10 de noviembre de 2019, ya actuaban y operaban como un “gobierno militar” y que una muestra de ello es la orden del entonces comandante en Jefe de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), Gonzalo Terceros, de quitar el avión presidencial 01 al entonces presidente Evo Morales.
Precisó que a la fuerza el avión presidencial fue utilizado ese día para trasladar a Morales al Chapare, en el departamento de Cochabamba, y que el piloto llevó a los tripulantes hasta el hangar militar.
“Me bajo y le digo a Evo: tú cierra la puerta y no salgas de acá. Afuera habían seis u ocho oficiales, más atrás unos 20 carapintadas, todos armados. Pregunto ¿por qué nos han traído acá? ¡Qué nos salvó! Que llegaron cientos de personas en motocicletas y vehículos. Evo estaba aún al mando del Estado. Nos querían secuestrar, no habíamos renunciado, pero los militares, el Comando en Jefe, hacía lo que le daba la gana”, indicó.