La Relatoría Especial para la Libertad Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó este miércoles su preocupación por los periodistas agredidos en Bolivia durante los últimos conflictos y pidió al Estado Plurinacional otorgarles el “máximo grado de garantías” para el desarrollo de su trabajo cotidiano.
“La @RELE_CIDH manifiesta su preocupación ante los reportes recibidos sobre el uso de la fuerza pública y detenciones en contra de trabajadores de la prensa que cubrían el conflicto entre productores de la hoja de coca (…) de los Yungas, (en) La Paz”, cita un primer mensaje publicado por la Relatoría en su cuenta en Twitter.
El martes, policías y un sector de los cocaleros de Yungas protagonizaron un violento enfrentamiento en la zona Villa Fátima de la ciudad de La Paz y, en medio de ese conflicto, varios periodistas fueron afectados.
“Según la información disponible, un periodista de Página Siete fue agredido y detenido (por algunas horas) por la Policía, y dos corresponsales habrían resultado heridos por gases lacrimógenos. (Además) en los días previos, esta Oficina también registró agresiones a reporteros en Santa Cruz y Cochabamba”, señala otro texto publicado por el organismo internacional en la misma red social.
“Por lo que (se) llama al Estado a otorgarles el máximo grado de garantías a fin de que puedan cumplir su función con libertad y seguridad”, remarca el pronunciamiento de la Relatoría.
La pasada jornada, mientras el periodista de Página Siete Carlos Quisbert todavía estaba detenido en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, llegó hasta esa oficina para gestionar su liberación y aseguró que se “garantiza el ejercicio periodístico de los trabajadores de la prensa” y rechazó “cualquier tipo de agresión, venga de donde venga”.
Mientras el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, después de que la Asociación de Corresponsales de la Prensa Internacional protestó por la agresión de dos de sus afiliados (Santiago Limachi y Sergio Limachi), anunció una investigación y también volvió a garantizar el trabajo de la prensa “en todos los rincones del país”.