En el marco de un acto por los 473 años de fundación de la ciudad de La Paz, el alcalde Iván Arias exhortó a los bolivianos a no dejar que el pasado y los símbolos patrios generen “división entre hermanos”.
“No debemos ocultar nuestro pasado precolombino, de ninguna manera, ni tampoco desdeñar los símbolos indígenas que son parte de nosotros; pero no debemos dejar que el pasado ni el uso de los símbolos (patrios) nos dividan hoy”, afirmó el alcalde en el acto central de aniversario celebrado este miércoles en la plaza Alonso de Mendoza, del que además participaron autoridades departamentales, instituciones y organizaciones sociales.
Por su parte, el gobernador Santos Quispe aseguró que la tarea de los gobernadores es “impulsar la unificación” de los bolivianos, ante las acciones de algunos sectores que intentan dividir al oriente y occidente del país.
“Nos han querido dividir, nos han querido (hacer) ver que hay un oriente y un occidente, (pero) la verdad (es que) somos uno”, enfatizó la autoridad departamental.
Arias y Quispe coincidieron en sus exhortaciones en medio de un ambiente político crispado desde el 24 de septiembre, cuando en ocasión del aniversario departamental de Santa Cruz la wiphala fue retirada de los mástiles de la plaza 24 de Septiembre, al punto de motivar que el gobernador Luis Fernando Camacho diga que ese símbolo patrio no representa a los cruceños.
En respuestas, el Gobierno y el oficialismo propiciaron sendos actos de desagravio de dicha bandera, instituida en la Constitución como el símbolo de los pueblos indígena originario campesinos del país.
El 12 de octubre, en coincidencia con la fecha de la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492, se desplegó el “wiphalazo” en varias ciudades del país, en reivindicación de esa enseña.