Los marchistas que exigen justicia por las masacres de 2019 y una comisión de autoridades del Gobierno decidieron este miércoles definir el próximo 5 de noviembre un plan de reparación integral a las víctimas, tal como recomendó el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
“El día 5 se va a trabajar el tema de un plan de reparación integral, en ese sentido son las conclusiones generales a las que hemos llegado producto de prácticamente 24 horas de trabajo continuo; para eso se hizo la marcha y creo que están complacidos los hermanos”, dijo David Inca, activista de los derechos humanos que participó de la movilización y que apoya de manera constante a las víctimas.
Precisó que en el encuentro del 5 de noviembre, que será en el Ministerio de Justicia, también se tocará el “tema jurídico” sobre los procesos en curso contra los posibles responsables de las masacres.
Además, “hemos logrado que se apruebe un decreto de ayuda en créditos (…) para que puedan acceder a créditos e impulsar su economía (las víctimas); hasta el 5 de noviembre el Gobierno (tiene plazo) para presentarnos el resultado de ese decreto con sus alcances”, añadió.
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, quien lideró la comisión gubernamental, indicó que en el encuentro no solo se tocó el pliego petitorio de 22 putos que fue presentado por los marchistas.
“Sino (también otros temas, pero en general) todos han coincidido que tiene que haber justicia, esa fue su principal demanda (…) y no es la primera vez que nos reunimos con los hermanos que buscan justicia”, ratificó.
La marcha de las víctimas de las masacres de Sacaba (Cochabamba) y Senkata (El Alto), ocurridas en noviembre de 2019 durante el gobierno de Jeanine Áñez, partió el 19 de octubre desde la localidad de Cararollo, departamento de Oruro, e ingresó el lunes al centro de la ciudad de La Paz.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes concluyó que en los hechos de Sacaba y Senkata –donde se registraron 20 muertos– hubo masacres, ejecuciones sumarias y uso excesivo de la fuerza.