El presidente Luis Arce, que ganó las elecciones de 2020 con el 55,1% de apoyo ciudadano, rindió este lunes un informe de su primer año de gestión de Gobierno en una bochornosa sesión de la Asamblea Legislativa Plurinacional.
Durante casi toda la primera parte de su discurso, se escucharon gritos en su contra y en su favor protagonizados por los legisladores de la oposición y del oficialismo, respectivamente, quienes incluso llegaron a agresiones.
Asimismo, los legisladores se llevaron una serie de pancartas y silbatos con los que convirtieron la sesión en un bochornoso acto.
“Hace un año, desde esta Asamblea Legislativa enviamos un mensaje de certidumbre a nuestro país, a los millones (de bolivianos) que trabajan honestamente para ganarse el pan que llevan a sus hogares y quienes siguen siendo el mejor ejemplo para aquellos pequeños grupos que continúan apostando a la desestabilización, a la confrontación y a la división entre bolivianos”, dijo Arce.
Agregó que esos grupos aún siguen sin mirar el presente con responsabilidad y con compromiso porque, según su versión, solo buscan “imponer sus intereses mezquinos sobre los intereses colectivos”.
Pero, “nuestra patria hoy más que nunca requiere que estemos en sintonía con el sentir de las familias bolivianas, especialmente, con aquellas más golpeadas con la crisis y la economía no puede parar un solo día porque eso significa no llevar el pan a sus casas”, remarcó Arce, quien cumple un año de Gobierno en medio de un paro indefinido impulsado por algunos sectores de los gremiales, cívicos, transportistas y otros en contra de la Ley 1386.
“Y en este sentido, en concordancia con el mandato que el pueblo boliviano nos dio, hoy rindo este informe de nuestro primer año de Gobierno”, remarcó el Jefe del Estado, quien, entre otros puntos, destacó los logros económicos de su gestión, la lucha contra la pandemia y la implementación de la educación en tres modalidades (presencial, semipresencial y a distancia).
Del mismo modo, en una serie de ocasiones cuestionó a la “derecha incapaz” y a los “golpistas”.