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La hija de Áñez cree que la suspensión del inicio de juicio a su madre es distractiva

Hija de Jeanine Áñez (centro) en conferencia de prensa.

Carolina Ribera, hija de la expresidenta Jeanine Áñez, consideró este jueves que la suspensión del auto de inicio del juicio oral en contra de su madre y otros ocho acusados por el caso Golpe de Estado II es solamente para “distraer”.

“Sé que ellos van a instalar otra audiencia de juicio oral lo antes posible, todavía adelantando los plazos, y (por eso) creo que esto es (solo) como para distraernos, por lo que debemos seguir firmes y continuar apoyándonos entre los familiares de los presos políticos”, afirmó minutos después de suspendida la audiencia previa del caso.

El Tribunal Primero de Sentencia Anticorrupción de La Paz suspendió sin fecha el comienzo del juicio oral contra Áñez y otros por su proclamación como presidenta en la crisis de 2019.

Pues, de forma unánime, el Tribunal dispuso “dejar sin efecto el auto de apertura del juicio (emitido en) fecha 18 de enero de 2022 por el juez técnico suplente Iván Perales Fonseca”. 

“Debiendo a cuyo efecto pasar obrados para que el Tribunal de Sentencia Anticorrupción, regularizando el procedimiento, emita un nuevo auto de apertura conforme a derecho (…)”, resolvió el Tribunal de Sentencia.

Mientras, Áñez permanece detenida de manera preventiva desde marzo de 2021 e incluso desde el miércoles se declaró en huelga de hambre.

“Su situación de salud permaneció muy delicada durante todos estos meses y esa es mi preocupación porque no sé qué consecuencias pueda tener esta huelga de hambre en su salud; pero ella está decidida (…) a usar sus últimas fuerzas para ir contra la injusticia”, agregó Ribera.

Áñez y ocho exjefes militares y policiales, entre ellos William Kaliman y Yuri Calderón, son acusados por los presuntos delitos de resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes, e incumplimiento de deberes a instancias del Ministerio de Gobierno, de la Procuraduría General del Estado y de la presidencia de la Cámara de Senadores, que consideran que la exsenadora violó reglamentos, leyes y Constitución para asumir el 12 de noviembre de 2019 la sucesión del dimisionario presidente Evo Morales.