Para el viceministro de Coordinación Gubernamental, Gustavo Torrico, la crisis en la Policía no se resolverá con un cambio de comandante ante rumores de ajustes en el mando policial y los desafió a “una auto-reflexión y ponerse los pantalones largos y poner orden en casa”.
“No es posible que de un tiempo a esta parte encuentres policías ‘chuteando’ autos, ‘volteando’ droga. No olvidemos que los que se han llevado la droga en camioneta y no la han entregado, son más de 400 kilos, se callan (los policías detenidos) y prefieren entrar a la cárcel porque luego los vas a soltar”, cuestionó.
El que fuera también Viceministro de Régimen Interior en el gobierno de Evo Morales afirmó que la crisis en la Policía no se resolverá con el cambio de un comandante, cargo que actualmente ejercer el general Jhonny Aguilera.
Dejando en claro que su posición la hace como un ciudadano, Torrico planteó que debe darse una reforma que implique que la Policía dependa de un civil en lo administrativo, designado por el Legislativo, y solo en lo operativo de un mando policial, además de poner en marcha una especie de “asuntos internos” como ocurre en policías del extranjero.
No obstante, aclaró que esta reforma debe abarca a instancias de la Fiscalía y el Órgano Judicial.
“¿Qué ocurre cuando se lleva a un hombre o mujer por narcotráfico? Hasta que lo has detenido es el escándalo, una vez lo han mandado a cautelares en tres meses nadie se acuerda y entonces ahí es donde viene la devolución de bienes, lo dejas en libertad, tiene dos casas y (se queda) una para uno y otra para el fiscal y si tiene tres una para el juez”, cuestionó.
Uno de los últimos casos en los que se mencionó algún nivel de relacionamiento policial con el delito fue en el caso de la ejecución de dos policías y un voluntario del Gacip en Porongo, en el departamento de Santa Cruz. El removió al personal de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) de Santa Cruz.