Se suspende la audiencia de apelación de Jeanine Áñez por recusación a dos vocales
La recusación contra los vocales Claudia Castro y Orlando Rojas tiene que resolverse en un plazo de 24 horas.
La expresidenta transitoria está recluida en el penal de Miraflores.
La defensa de la expresidenta transitoria Jeanine Áñez recusó a dos vocales de la Sala Penal Cuarta de La Paz, por lo que este jueves se suspendió la audiencia de apelación restringida en el proceso denominado Golpe de Estado II.
La audiencia debía resolver la recusación a dos jueces por parte de la defensa de la expresidenta Jeanine Áñez.
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Imparcialidad
El abogado defensor de la recluida Luis Guillén confirmó la medida y dijo que ambos vocales no eran imparciales porque anteriormente ya emitieron resoluciones en contra de su cliente
“Las dos autoridades han emitido resoluciones donde califican la presidencia de Jeanine Áñez como inconstitucional; por lo tanto, en apelación no pueden resolver si esa presidencia fue constitucional o inconstitucional”, declaró.
Golpe de Estado II
En este proceso, Áñez está acusada de haber asumido la presidencia del país de manera inconstitucional, el 12 de noviembre de 2019.
Ello, luego de la renuncia de Evo Morales.
El este caso, la expresidenta transitoria ya fue condenada a 10 años de cárcel por los delitos de incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes.
“El Tribunal no ha procurado la obligación de recibir a todos los testigos; entonces son bastantes las vulneraciones en este proceso”, acotó Guillén.
Esta recusación contra los vocales Claudia Castro y Orlando Rojas tiene que resolverse en un plazo de 24 horas.
Por lo pronto, se desconoce la nueva fecha y hora para la realización de la audiencia de apelación.
Proclamación
El 10 de noviembre de 2019, Evo Morales renunció a su cargo en medio de protestas cívicas que denunciaban un supuesto fraude electoral.
Se sumó a ello un motín policial y hasta una “sugerencia” de las Fuerzas Armadas y la Policía para que dimitiera.
Dos días después, Áñez, como segunda vicepresidenta del Senado, se proclamó presidenta.
Tuvo el apoyo de diversos sectores, pero, sobre todo, de políticos de oposición que hasta la fecha insisten con que fue constitucional dicha proclamación.