La Policía encuentra un tercer vehículo del narcotraficante uruguayo Sebastián Marset
El capo del narco es buscado en su país, Paraguay, Brasil, Estados Unidos y, ahora, en Bolivia.
El vehículo de lujo fue abandonado cerca del noveno anillo, entre la Tres Pasos al Frente y barrio 21 de Julio, en Santa Cruz.
Agentes de la Policía encontraron este martes un tercer vehículo usado en la fuga del narcotraficante uruguayo Sebastián Marset Cabrera cuando intentaron detenerlo.
Vecinos del noveno anillo, entre la zona Tres Pasos al Frente y el barrio 22 de Julio, alertaron a la Policía sobre un vehículo lujoso de color blanco abandonado en el lugar, con las mismas características que los motorizados buscados por las autoridades.
La Policía precintó el auto abandonado para que más tarde agentes de la Dirección de Prevención contra el Robo de Vehículos (Diprove) lleguen al lugar para trasladarlo a sus dependencias y realicen las investigaciones respectivas.
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Un primer vehículo fue localizado en el municipio de Cotoca, en el que presuntamente Marset se dio a la fuga el sábado, de su lujosa casa en la capital oriental. El motorizado es marca BMW, color negro safiro, con placa 5739-IXE, y fue hallado en una zona desolada y de poca circulación.
En esta jornada, la Policía y el Ministerio Público allanaron inmuebles en distintos puntos de la ciudad cruceña con la finalidad de encontrar elementos y documentación relacionados al narcotraficante.
El uruguayo es considerado un “pez gordo” del narco y se escondía en Bolivia como dirigente, futbolista y bajo un nombre falso. Conformó el club Los Leones de El Torno, con el que participaba de torneos de la Asociación Cruceña de Fútbol (ACF).
Llegada
Se presume que llegó a Bolivia en septiembre de 2022 e inscribió su equipo el 14 de abril de este año. Se lo conocía por dedicarse a la contratación de jugadores.
El Ministerio Público emitió una orden de aprehensión contra Marset, por 10 delitos: secuestro, privación de libertad, robo agravado, lesiones graves y leves, organización criminal, asociación delictuosa, atentado contra los organismos de seguridad del Estado, uso de instrumento falsificado, falsedad ideológica y tráfico de armas.
El delincuente es buscado en su país, Paraguay, Brasil, Estados Unidos y, ahora, en Bolivia.