Bolivia se suma al proyecto Colibrí de vigilancia de la aviación para combatir el narcotráfico
El ministro de Gobierno se reunió en Bélgica con el secretario general de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), Kunio Mikuriya, y el coordinador del proyecto Colibrí, Lorenzo Martínez Fernández.

El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, se reunión con distintas organismos en Europa.
El Gobierno anunció este viernes que Bolivia, desde noviembre, será parte del proyecto de Vigilancia y Control de la Aviación General en la Ruta de la Cocaína (Colibrí), ejecutado en el marco del Programa de los Flujos Ilícitos Globales financiado por la Unión Europea (UE) en contribución a la lucha contra el narcotráfico
“Desde noviembre seremos parte de este gran proyecto para el intercambio de información, operaciones conjuntas, capacitación técnica y otros”, informó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, a través de su cuenta de redes sociales.
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La autoridad indicó que se reunió en Bélgica con el secretario general de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), Kunio Mikuriya, y el coordinador del proyecto Colibrí, Lorenzo Martínez Fernández, y con otras autoridades con el fin de intercambiar criterios y experiencias en temas vinculados a la seguridad en la lucha contra la delincuencia organizada.
El nuevo proyecto Colibrí se dirige específicamente a la Aviación General (AG), un vector que concierne a todas las operaciones de la aviación civil para fines distintos del transporte comercial.
En la página digital illicitflows.eu se informa que la aviación general no está sujeta a los mismos mecanismos de inspección policial o aduanera, y las medidas de seguridad de los vuelos se relajan sustancialmente, incluso en zonas altamente reguladas.
Esto significa que la AG representa una oportunidad para el crimen organizado y ofrece una serie de ventajas a los traficantes. Se trata de un medio de transporte discreto y rápido, que puede utilizar aeropuertos más pequeños donde las fuerzas del orden suelen estar ausentes.