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Evo insiste en un supuesto ‘plan negro’ para ‘defenestrar’ a la dirigencia del MAS

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Evo Morales. jefe del MAS, durante el congreso en lauca Ñ

El expresidente del estado y jefe nacional del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, insistió en que el Gobierno supuestamente ejecuta un “plan negro” en su contra y el de los miembros de la directiva de su partido.

Nuevamente atribuyó la información a “policías y militares patriotas” que le advirtieron de ello.

“Policías y militares patriotas (son los) que nos advierten del Plan Negro para defenestrar a la dirigencia del Instrumento Político”, escribió el también dirigente cocalero en su cuenta de X.

El discurso de un supuesto “plan negro” no es reciente. Comenzó el 3 de septiembre de 2022, cuando Morales habló por primera vez de esa acción en un ampliado cocalero en Cochabamba.

División en el MAS

Según Morales, ese plan busca “defenestrar a la dirigencia del MAS” e inhabilitarlo políticamente para las elecciones presidenciales de 2025. Para esos comicios el líder masista es el único que confirmó su candidatura, pese a que no se realizaron, aún, las elecciones primarias que exige la Ley de Organizaciones Políticas.

“Mientras algunos jueces y fiscales liberan a procesadas por corrupción y policías denunciados por volteo de droga, el gobierno está persiguiendo a dirigentes del MAS-IPSP”, agregó Morales en la misma publicación.

Desde que comenzó con esa acusación, Morales apunto al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, y al titular de Defensa, Edmundo Novillo, de “maquinar” las acciones del supuesto plan. Incluso, los acusó de buscar su “desaparición”. Pese a eso, no presentó ninguna denuncia formal ante el Ministerio Público ni pruebas concretas de sus denuncias.

Hace tiempo que el además líder de las Seis Federaciones del Trópico de Cochabamba lanza fuertes dardos en contra del Gobierno y del mismo presidente Luis Arce. Lo acusa, por ejemplo, de “derechizar” el MAS y de ser “traidor del instrumento político”.

Ante ese quiebre político, las diferencias también se hicieron visible en la estructura social y política del MAS. Incluso, la Asamblea Legislativa vio “fracturada” la bancada oficialista, por el apoyo de un grupo a Luis Arce y, de otro, a Evo Morales.