Icono del sitio La Razón

Evolución de la institución del orden

Fundada el 22 de junio de 1826 por el Mariscal Antonio José de Sucre, se la conoce como la institución del orden, dada su esencia tradicional de preservar el orden público. El contexto de nacimiento de nuestra institución es el de un Estado con muchas debilidades institucionales y orgánicas, amenazado en su independencia e integridad territorial por fuerzas externas que se disputaban la influencia geopolítica en la región.

Según José Carlos Mariátegui (escritor y político peruano), la ausencia de un sector político y económico de suficiente estructura orgánica como para asumir la conducción estatal, derivó en una inestabilidad política que se traducía en la recurrencia a los “cuartelazos” o golpes de Estado.

El rol de la Policía era funcional al de las Fuerzas Armadas, sustituyendo la ausencia de un proyecto político democrático-burgués por el uso de la fuerza pública, lo que permitía preservar el control del poder recurriendo a la coerción.

En la historia de la institución, su subordinación funcional a las Fuerzas Armadas, formadas doctrinalmente bajo la concepción verticalista prusiana, la caracterizaban como una entidad que reproducía el carácter de las relaciones políticas dominantes, marcadas por la racialización de la relaciones sociales como mecanismo de cohesionamiento estatal (Álvaro García Linera), siendo la institución del orden la llamada a asumir estas tareas de preservación del establishment, a partir de la “violencia estatal” como mecanismo de estabilidad política.

En la época de la “guerra fría” de la post Segunda Guerra Mundial, con la aplicación de la “doctrina de seguridad nacional”, la Policía Boliviana, bajo el mando de las Fuerzas Armadas, estaba orientada a combatir a los movimientos progresistas o revolucionarios.

ROL. En el contexto refundacional de constitución del Estado plurinacional el nuevo rol de la Policía está signado por la protección de los derechos humanos de la población, para brindar seguridad ciudadana y combatir a la delincuencia y al crimen organizado.

En la nueva Constitución se mantienen inalterables los anteriores regímenes relativos a las Fuerzas Armadas y a la Policía Boliviana; por la complejidad que adquirió el debate constituyente, dados los intereses estratégicos en pugna, se decidió no modificar esta parte del texto constitucional a fin de evitar mayores tensiones.

Sin embargo, la ley del Sistema de Seguridad establece un nuevo rol institucional, cuyo contenido central son las tareas de seguridad, para lo cual se prevé la transformación y modernización, asumiendo que la protección del ciudadano constituye su fundamento institucional. La ley plasma como valores principales de protección la defensa de la vida, la integridad física y el patrimonio público y privado.

Para cumplir esto se asumen cuatro desafíos: mejorar sus condiciones de vida y trabajo; cualificación permanente de sus integrantes a través de procesos formativos básicos, académicos y de especialidad; desconcentración dirigida al logro de un mejor control territorial en la lucha contra la criminalidad; y la tecnificación de sus dispositivos para fortalecer su proyección profesional científica.

Entre 1999 y 2005, el incremento salarial a cabos y policías de base fue de 2,1% y 2,8%, respectivamente; en cambio, de 2006 a 2013, el incremento salarial a cabos y policías fue del 14,7% y 15,9%, respectivamente; bajo el principio del incremento inversamente proporcional, que beneficia más a los que ganan menos. Estas mejoras salariales fueron consensuadas entre el Comando Nacional de la Policía y los representantes de  los policías de base.

Entre 2006 y 2013 se destinó Bs 7.529 millones al pago de salarios con un incremento gradual cada año. A partir de 2008 el Bono de Seguridad Ciudadana se incrementó para generales, jefes y oficiales en 21%; para jefes y oficiales administrativos, en 48%; para suboficiales y clases, en 57%, y para policías, en 29%.

Además, todos los policías, sin distinción de rango reciben una dotación de víveres que ha mejorado las condiciones de vida de sus familias. De 1999 a 2005, esta dotación era de 1 quintal de harina, 1 quintal de azúcar y 1 quintal de arroz al año. Ahora  es de 2 quintales de harina, 2 quintales de arroz, 2 quintales de azúcar y un adicional de acetite comestible. Los policías además se han beneficiado con el doble aguinaldo.

FORMACIÓN. La nueva Ley Orgánica Policial garantiza el acceso a la especialización del policía sin jerarquía y garantiza el ejercicio de su función según su área de especialización. Para esto, el Ministerio de Gobierno ha gestionado un Diplomado en Seguridad Ciudadana y Alta Gerencia Policial, un Curso Internacional Antisecuestro y Antiextorsivo, un Curso en Administración y Gestión Pública y Normativa de Seguridad Ciudadana.

Además, hubo programas de intercambio de experiencias sobre Análisis Delictual y Política de Prevención, un seminario internacional sobre la Perspectiva de la Seguridad Ciudadana en América Latina y en Bolivia.

Entre 1999 y 2006 se construyeron 75 módulos policiales; de 2006 a 2013 y en concurrencia con entidades territoriales autónomas, se edificaron 268 módulos policiales y 22 Estaciones Policiales Integrales (EPI). La meta es construir hasta 2020, 50 EPI en todo el país, en ciudades con más de 100.000 habitantes. 

Con la reciente entrega de 80 vehículos patrulleros y 12 grúas del Gobierno a la Policía, el total de medios de transporte entregados a la institución del orden desde 2006 se ha incrementado a 1.047, que en promedio representa un crecimiento del 700% con relación a los gobiernos neoliberales. Además, desde ese año, el Gobierno facilitó a la institución del orden 1.632 motocicletas (ocho marca Harley Davidson de última tecnología).  

El Plan Operativo especial denominado Chachapuma se ha implementado en el ámbito nacional hasta reducir las tasas de delitos y contravenciones de manera extraordinaria. De junio a diciembre de 2013 se han atendido 431.877 casos; de los cuales 3.191 fueron delitos, 58.529 faltas y contravenciones, y 370.157 hechos e infracciones de tránsito. Se realizaron 14.121 operativos en bares, alojamientos y posadas, en coordinación con gobernaciones, alcaldías y Migración. Fueron arrestadas 49.543 personas en 237 días de operativos.

TECNIFICACIÓN. Para la tecnificación de la Policía, hemos dado un salto de 20 años con la adquisición de dos helicópteros, 471 cámaras de videovigilancia y casi 1.000 GPS, o sistemas de control satelital en las carreteras.  Además se ha instalado el sistema de Comunicación Troncalizada en Tarija y Santa Cruz con el respaldo de las gobernaciones y municipios de ambos departamentos.

Al menos cuatro centros de despachos automáticos en el eje troncal del país articulan la comunicación e información nacional obtenida de las cámaras, los GPS y los helicópteros con las unidades especiales de la Policía, que junto a la Cruz Roja y los servicios de primeros auxilios constituyen el mejor mecanismo de reacción inmediata para prestar socorro oportuno a la población. 

Estos logros nos permiten decir que hemos avanzado en la mejora y fortalecimiento de infraestructura, dotación de medios de combate al delito y capacitación de recursos humanos para la Policía Boliviana. No es suficiente, pero el gobierno del presidente Evo Morales continuará con su labor indeclinable de fortalecimiento de la institución del orden en beneficio de nuestra población.