Nicolás Laguna Quiroga: ‘Hay trabas para digitalizar la justicia’
El Consejo de la Magistratura alegó una norma del siglo XIX para rechazar la digitalización, revela Laguna.
El sitio está en Sopocachi, un barrio de La Paz que combina la tranquilidad de lo residencial con el agitado clima de oficinas y gente sin tiempo. Allí está la sede de la Agencia del Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación (AGETIC), la entidad del Ministerio de la Presidencia que tiene la compleja misión de promover la transformación digital del Estado.
En esta entrevista con Animal Político, Nicolás Laguna aborda los retos de la entidad que dirige, precisamente en su oficina, un sitio que más bien parece un laboratorio plagado de monitores de computadora y gente sin tiempo, conectada en red.
— ¿Se avanza realmente en el desarrollo de un gobierno digital?
— Generar una gestión pública con tecnología digitalizada era una deuda de años con la sociedad (…). Hemos desarrollado hasta ahora 25 proyectos de gobierno electrónico y tenemos otros 15 en proceso. Hemos ido confrontando a todo el aparato del Estado, comprendiendo además que esto no solo tiene que ver con sistemas informáticos, sino con la transformación de toda la gestión pública; hay que cambiar la forma de pensar y la relación entre el Estado y los ciudadanos.
— Se trata entonces de la transformación de toda una cultura…
— Es una cultura organizacional contra la que luchamos todos los días. Hallamos elementos de la colonia y de principios de la república. En muchos otros ámbitos, el Estado, sobre todo en su normativa, está anclado en el modelo fordista, de esa lógica de la cadena de montaje de principios del siglo XX (…), aún a pesar de que en los años 70 el mundo ya comenzaba a cambiar, justamente por la aparición de las tecnologías de información. Entonces, encontramos cosas que son de la colonia y otras del modelo fordista. En eso nos quedamos y el gran reto es transformar la gestión pública de manera que se salte al siglo XXI, con tecnología y lógicas distintas de pensar; de gobernar, es decir, construir bien común.
— ¿Y estas trabas en cuánto tiempo se pueden superar?
— Casi en todas partes del mundo se han creado instituciones gubernamentales para adaptar el Estado al entorno de la sociedad. En Bolivia, la gente accede a internet y usa redes sociales; se comunica así, pero el Estado sigue enviando cartas en papel, sigue sellando. Por eso, estamos hablando de una transformación lenta y en todas partes fue así. La idea es enfocarnos en sectores que tienen una relación cercana con el ciudadano y luego hay una tarea enorme. Solo en el Órgano central, hay 150 entidades públicas.
— Ya tuvieron una experiencia en el ámbito de la administración de Justicia. ¿Cómo les fue?
— A manera de ejemplo. Al Consejo de la Magistratura queríamos ayudarles con la administración de la Justicia y Derechos Reales. Avanzamos, hicimos relevamientos, explicamos, les hicimos una propuesta y nos enviaron un informe para decirnos que la Ley de Derechos Reales de 1870 —eso es el siglo XIX— no les permitía implementar tecnología. Ésa fue su respuesta, con informe técnico y firmado. Ése es el tipo de trabas, y como se trata de un Órgano independiente no puedes hacer nada.
— Pero, hace poco se firmó un acuerdo con la Justicia…
— En diciembre de 2017 firmamos un convenio con el Ministerio de Justicia, el Tribunal Supremo de Justicia y el Consejo de la Magistratura. Llega enero y les decimos ‘empecemos’, pero otra vez comienzan las trabas. ‘Que no, que recién hemos cambiado, que se posesionen las nuevas autoridades’. Les decimos, pero vamos igual desarrollando el sistema y nos responden: ‘No, esperaremos’. Hay una cultura muy arraigada y es otro Órgano y no podemos hacer nada.
— Pero sí hay avances en otros ámbitos del Estado. ¿Dónde?
— En el Órgano central, sí ha habido la decisión política, muy firme, para apoyarnos en este trabajo, y que las entidades públicas se modernicen. Una experiencia que yo rescato es la del Ministerio de Trabajo, donde pusimos en marcha un sistema para el registro de planillas del registro obligatorio de empleadores. Ellos han estado abiertos para que todos los procedimientos sean digitales y que no vaya nadie a hacer ningún tipo de trámites a esas oficinas (…). Y en cuanto hicimos una siguiente propuesta sobre la calidad de atención al ciudadano, el ministro dijo ‘queremos ser los primeros’ y de nuevo fue una experiencia positiva. Es un programa en ventanilla, en redes sociales, en teléfono, es completo.
— ¿Cuáles son los proyectos más importantes sobre los que está trabajando la AGETIC?
— La empresa digital, que es una plataforma completa para los empresarios. Todo lo que haga el empresario tiene que estar ahí hasta fines de año. Ahí hablamos de varias decenas de trámites y después tenemos todo el tema del transporte terrestre que tenemos que interconectarlo y eso implica Tránsito, Policía, Obras Públicas, la ATT (Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes), Vías Bolivia, ABC; todos los actores involucrados integrados en una sola plataforma. Los usuarios podrán acceder a la información en un solo portal en la internet, ya que es una red para ver el control de peajes, importaciones, exportaciones, las licencias de conducir y vamos a proponer a los operadores venta de pasajes.
También estamos preparando un programa para la aeronavegación, pues si bien uno puede creer que los aviones están con toda la tecnología, aún hay procedimientos que se hacen en papel; se puede ver a los pilotos correteando con sus papelitos o recogiendo su sello para salir; o en las torres de control aún existen cuadernitos (…). Hay aeropuertos que se deben mejorar, especialmente los que controla AASANA.
Por otro lado, tenemos en puerta el servicio del notariado digital. El sistema está terminado y solo estamos esperando el cambio para dotar la firma digital a todos los nuevos notarios que sean seleccionados.
— ¿La AGETIC promoverá la cultura de los ciudadanos para que se incorporen a lo digital?
— La gente está usando tecnologías, así lo dice nuestra encuesta (…). A la banca y otras instituciones les hace falta hacer las cosas más simples. La gente se adapta.
La corrupción se puede ocultar en el papeleo
Laguna percibe que con la digitalización de la burocracia se puede ejercer mayor control sobre los procedimientos burocráticos y, de este modo, evitar los factores de riesgo que generan la corrupción.
— ¿Esta cultura del papeleo, de los sellos no ayuda a la transparencia? ¿Puede promover actos vinculados con la corrupción?
— Detrás de ciertos procedimientos administrativos se puede ocultar la corrupción; no necesariamente tiene que suceder. Si la gente es transparente y honesta, no hay corrupción; pero hay gente que tiene mala fe, que oculta corrupción detrás de todos esos papeleos.
— Y ese papeleo no ayuda…
— Si tú tienes una cantidad de papeles que luego no entran en las oficinas y tienes que llevarlos a un galpón, donde se van a quedar cantidades ingentes de papel, nadie se anima a revisarlos después. ¿Alguien va a verificar si era cierto o no? Nunca, jamás. Si se tiene la información digitalizada, si se tiene una base de datos en lugar de papeles, la verificación de la información de entre miles y millones de archivos se hace en pocos segundos o minutos, en lugar de hacer revisiones manuales. Entonces, sí, la tecnología te ayuda a certificar a corroborar que las cosas estén bien hechas y el papel te ayuda a llenar un folder muerto, al fondo, en algún galpón que nadie va a volver a ver nunca más en la vida.
— Los procedimientos digitales aportan a la transparencia…
— Sí, y el gran ejemplo es el Sicoes (Sistema de Contrataciones Estatales de Bolivia), que tiene la información de contratación de bienes para el Estado por encima de Bs 20.000. Todo está in internet; ahora es el ciudadano que debe usar el sistema.
Nicolás Laguna Quiroga dirige a 92 profesionales, expertos en Sistemas informáticos y procedimientos administrativos, para hacer viable el gobierno electrónico. Para este año, se presentarán unos 15 proyectos entre los que destacan aplicaciones para el transporte y pago del bono a discapacitados.
Pérfil:
Nació: en La Paz en 1983. Profesión: Sociólogo de la UMSA.
Ocupación: Director de la Agencia del Gobierno Electrónico y Tecnologías de Información y Comunicación (AGETIC)
Fue director de la Agencia para el Desarrollo de la Sociedad de la Información en Bolivia (ADSIB) y luego de la AGETIC. Fue asesor en la Vicepresidencia del Estado