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Arturo Alessandri: La tarea es volver a enamorar a la clase media

Amás de una semana de las movilizaciones del 21F, a favor y en contra de la repostulación de Evo Morales, el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Arturo Alessandri, abrió un espacio en su agenda y recibió a Animal Político para evaluar el alcance de estas acciones. Como ya lo hicieran otras voces del oficialismo, Alessandri hace hincapié en que la estrategia gubernamental es acercarse a la clase media, de la que espera se apropie del proceso de cambio. En una analogía de lo sucedido en Venezuela, país al que ve en una “terrible” situación económica, pero con base social “ideologizada”, afirma que en Bolivia se volcaron los esfuerzos a desarrollar la economía y que ahora el desafío es que la clase media lo valore.

Tras lo sucedido el 21F, en la movilización en rechazo al fallo del TCP que habilita a Morales a una repostulación indefinida y en defensa de los resultados del referéndum de 2016, ¿se ha pensado desde su despacho en algún tipo de acercamiento, por ejemplo, con el movimiento cívico?

— Lo decíamos antes del 21F: mientras una movilización ciudadana sea democrática y pacífica es legítima. Y tenemos la obligación de respetarla. Si en algún momento tenemos que reunirnos con entidades cívicas que tengan alguna actitud de disenso en nuestra contra, siempre que lo haga en el marco democrático, lo haremos con el mayor gusto. De lo que se trata es de asumir una nueva realidad de lo que vivimos porque mucho de lo que asumimos como verdad no responde a la realidad objetiva, sino que es una manipulación de las redes sociales (…). El disenso es parte de la democracia, pero también así lo es que las minorías acepten la voluntad de las mayorías. Nunca hubo un presidente más votado en la historia de Bolivia. El argumento de la oposición de que el apoyo del presidente ha disminuido de forma objetiva se verá en las próximas elecciones. (…)

— El vicepresidente Álvaro García admitió que en el paro cívico del 21 de febrero se vio la polarización en el país y que las fuerzas opositoras han logrado irradiarse a escala nacional, sin embargo, no ve un “empate catastrófico” ¿cuál es su evaluación sobre el tema?

— Lo que ha ocurrido es que hemos tenido una mejora cualitativa (económica) y esa mejora ha llegado a los bolsillos de los bolivianos. Hoy tenemos una clase media emergente que no existía hace 10 años y esa nueva clase media está buscando su posicionamiento político. Si hubo algún defecto en estos 12 años es que si bien nos hemos preocupado mucho de la economía, no nos hemos dedicado lo suficiente a la política y no hemos tenido la capacidad de ideologizar, sobre todo a la clase media emergente. Entonces, el desafío es que la clase media emergente se apropie y se empodere del proceso de cambio porque ellos son resultado de éste. Si uno ve Venezuela ahora nadie puede negar que la situación económica es terrible, pero ese gobierno sigue teniendo el apoyo de la gran mayoría de la población porque ellos se ocuparon de ideologizar a la base social aunque abandonaron su economía. (…)

— ¿Coincide con García al decir que la clase media es el objetivo en disputa de las elecciones?

— Las democracias modernas no existen sin el apoyo de la clase media, pues es la que define a qué lado se inclina una democracia. Ignorar el peso político de la clase media sería un error estúpido y no lo vamos a hacer y mucho más cuando esa clase hace años estaba empobrecida e ideológicamente e históricamente es parte de este proceso.

— ¿Cómo evalúa el Gobierno las movilizaciones del 21F, tanto la que defendió el 21F como la que apoyó la candidatura de Morales?

— Salvo el caso de los departamentos de Santa Cruz y eventualmente Tarija, lo ocurrido el 21F no ha tenido, en términos de lo que le corresponde a la oposición, una relevancia mayor. Obviamente se ha sentido la dificultad de transitar por las calles, pero vimos bloqueos de sillas vacías, cintas atadas y con muy poca o en algún caso con ninguna participación ciudadana. Si hablamos de una correlación de la presencia de la gente en las calles, lo que ha ocurrido en las movilizaciones de las organizaciones de la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conalcam) en todo el país es que hubo una participación masiva y fueron manifestaciones pacíficas y multitudinarias. Si hablamos de la presencia de la gente en apoyo al Gobierno, al proceso y la candidatura de Morales han sobrepasado las movilizaciones de la derecha.

¿Las protestas contra la repostulación de Morales no muestran el descontento de la población boliviana?

— La política es dinámica y dentro del derecho democrático al disenso es obvio que en Bolivia siempre va a existir un grupo que se siente afectado por las políticas de nuestro Gobierno, probablemente porque está perdiendo sus privilegios económicos y va a asumir tareas de oposición, lo cual no nos preocupa. Pero, lo que sí nos preocupa es que los jóvenes influidos por las redes sociales y la clase media emergente tenga posiciones políticas que no son propias a la realidad económica y política a la que debieran responder natural e históricamente. Asimismo, ya lo hemos anunciado como Gobierno (…) una tarea prioritaria para los próximos meses, de aquí en adelante, es volver a llegar a la clase media, esa clase media emergente. Yo usaría una frase que hace unos años la usaba mucho el Vicepresidente y es: ‘volver a enamorar a la clase media’. Ésa es nuestra tarea. (…) Y de lo que se trata es de empoderar a la clase media, se trata de que sean escuchadas sus decisiones políticas y probablemente es la meta que tenemos de aquí en adelante.

— En tanto, tomando en cuenta que el presidente Morales anunció que se prevé que en estos años habrá más conflictos, ¿cuál será el eje de trabajo en la coordinación con los sectores sociales?

— El fin es mantener una línea de vinculación abierta, amplia y pluralista (…). En ese sentido, me he planteado el desafío de escuchar a las plataformas ciudadanas que se organizaron en estos tiempos sobre todo las que sean legítimas y no tengan un afán partidario o estén financiadas por partidos políticos.

Articulación con sectores sociales debe afianzarse

El nuevo viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Arturo Alessandri, manifestó que existe la necesidad de profundizar el nivel de articulación con las organizaciones sociales. Asimismo, la autoridad señaló que la coordinación con esos actores también debe ser realizada por todos los ministerios.

— El ministro de Gobierno, Carlos Romero, señaló que una de las debilidades del Ejecutivo es una mayor interlocución con los sectores sociales y la población. ¿Cómo se encarará este tema?

— Considero que la coordinación con las organizaciones sociales no es un tema exclusivo de este viceministerio porque si bien fue creado con este fin, esta labor también debe ser realizada por todos los ministerios. En esa línea, cuando el ministro Romero hace alusión a este tema, más que una falencia, creo que se refiere a la necesidad de profundizar el nivel de articulación con las organizaciones sociales, ya que el Gobierno se reconoce y se proclama como de los movimientos sociales y tiene la obligación de que la relación con esos sectores sea fluida. Indudablemente, no todas las demandas serán atendidas porque ésa es la tarea de gobernar, escuchar las solicitudes, darles prioridad y si son necesarias consolidarlas como una política pública. Como nunca en la historia, estos 12 años de gobierno mostraron una nueva forma de hacer política y se trata de que las organizaciones tengan más llegada a los niveles de decisión política (…). Por eso, estoy convencido de que la mejor negociación es en la que no hay victoriosos, es en la que todas las partes ceden y así todos ganamos. Se trata de hacer un ejercicio de coordinación de la gestión pública para encontrar el equilibrio.

Arturo Alessandri Severich

Admitió que uno de los errores del Gobierno es que si bien se han preocupado  de la economía no se han dedicado de forma suficiente a la política y no han tenido la capacidad de ampliar su influencia ideológica, principalmente a la clase media emergente.

Pérfil:

Profesión: Abogado, especialista en Derechos Humanos.

Cargo: Desde febrero es Viceministro de Coordinación con los Movimiento Sociales.

En 2006, ocupó el cargo de concejal por el MAS en Oruro. En 2015, fue jefe de Trabajo en Oruro. En 2017, fue nombrado Viceministro de Empleo, Servicio Civil y Cooperativas.