La investigación sobre la privatización en Bolivia es una aproximación académica, científica, sobre el proceso de enajenación de empresas públicas y las consecuencias nefastas que tuvo la privatización para Bolivia. Esta decisión fue aprobada por la Asamblea Legislativa Plurinacional. Por tanto, también es un juicio que hace la historia, que el país les hace a los que humillaron y vendieron por migajas patrimonio boliviano. Es un juicio ante la historia sobre bases científicas de investigación y pruebas totalmente contundentes. Es una página oscura de la historia que no puede repetirse.

La investigación científica se dividió en dos partes: estudio de la privatización de empresas del Estado y estudio de la mal llamada “capitalización” que, en realidad, fue otra manera de privatizar empresas estratégicas para el país.

Privatización, globalización y neoliberalismo. La política de privatización marcó la vida de nuestros países durante dos décadas, bajo un modelo que implementó una nueva hegemonía a nivel mundial, conocida como globalización, a partir del Consenso de Washington y las reformas políticas de segunda generación de la década de los noventa del siglo pasado, entre otros aspectos que marcaron el ingreso mundial a la lógica de la unipolaridad y la primacía de las transnacionales.

Parámetros objetivos de la investigación. Los parámetros fundamentales de la investigación fueron: 1. Valor de las empresas estatales; 2. Montos recibidos por su venta; 3. Pérdida de patrimonio; 4. Pérdida de utilidades; 5. Impacto negativo para la economía del país; 6. Endeudamiento externo para privatizar empresas estatales; 7. Redes de poder armadas para la privatización; 8. Violaciones a la Constitución y las leyes; 9. Vulneración de los propios procedimientos establecidos para la privatización; entre otros aspectos.

Los resultados del saqueo. De la investigación surgieron las siguientes conclusiones generales:

I. Se privatizaron, por debajo de su valor, empresas que eran productivas y generaban ganancias para Bolivia (ejemplos: LAB, Enfe, PIL, Cementeras El Puente y Fancesa, Hilandera Santa Cruz, Fábrica de Aceites de Villa Montes);

II. Se perdió soberanía (ejemplos: YPFB, LAB, Enfe, ENDE);

III. Se trasladó recursos naturales no renovables a manos privadas y transnacionales sin ningún beneficio para el país (ejemplos: Minería, Hidrocarburos, Agua);

IV. Se invirtió capital en las empresas, justo antes de su privatización;

V. El Estado asumió las deudas de las empresas y las dejó “limpias” a los que las compraron;

VI. Se usó al Estado como fuente de enriquecimiento privado.