No nos quieran, pero no nos agredan
En noviembre, poco más de 700 cubanos en misión médica dejaron el país. El diplomático reivindica su labor.
La relación con Cuba está en su peor momento, se sabe, desde el reciente cambio de gobierno. La mayor tensión se la tuvo cuando el 13 de noviembre (al día siguiente de la posesión de la nueva Presidenta) la Policía detuvo a cuatro miembros de la misión médica cubana acusándolos de financiar las protestas contra la administración de Jeanine Áñez, porque fueron encontrados con dinero (alrededor de 700 mil bolivianos); la embajada del país caribeño aclaró que el efectivo era para pagar servicios básicos y alquileres de los 107 miembros de la Brigada Médica en la región. El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, llegó a declarar a CNN (versión VOA, la Voz de América) que los propios detenidos habían afirmado que el dinero “era para pagar a movimientos sociales en el país”. Hubo una protesta por Twitter del propio canciller de ese país, Bruno Rodríguez Parrilla; y La Habana dispuso que desde el viernes 22 de noviembre empezarían a irse los 725 ciudadanos cubanos que a la fecha estaban en el país.
—¿En cuántos países tienen este tipo de brigadas médicas?
—En 67 países tenemos colaboración médica. En Cuba rige el principio martiano de que “se comparte lo que se tiene, no se da lo que sobra”. Hoy Cuba tiene un médico por cada 117 habitantes; por esa razón nos podemos dar el lujo de enviar misiones médicas a distintos países. La colaboración médica con Bolivia en realidad empezó en 1985, con la donación de tres salas para terapia intensiva en hospitales infantiles de Santa Cruz, Cochabamba y La Paz.
— Se les ha cuestionado que de la totalidad de la Brigada Médica, unas 700 personas, 71% era personal no médico o no calificado; se habló de una mayoría de cocineros y choferes.
— A mí personalmente me molesta mucho la mentira, la infamia; decir que eran cocineros y mecánicos, que no tenían calificación. Aquí están las cifras: En noviembre, la Brigada Médica cubana estaba compuesta por 749 personas, 701 en el país porque en ese momento 48 estaban de vacaciones en Cuba. De esos 749, 406 eran médicos (54,2%), 250 eran licenciados técnicos (33,3%), 9 estomatólogos (1,2%) y 84 de personal de apoyo (11,2%); o sea, el contingente vinculado a la asistencia médica (médicos, técnicos y estomatólogos) llegaba a 88,7% del personal y la gente que prestaba apoyo, muy necesario, por cierto, apenas llegaba a 11,3%.
— A propósito de los salarios que tendrían los médicos cubanos, el presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea, afirmó que no se sabía específicamente qué hacía la misión cubana.
— Molesta que digan que no ha habido resultados, cuando hay más de 727 mil operados de la vista, de ellos, 1.937 en Cuba. Hemos tenido más de 72 millones de casos vistos; podemos considerar 117.546 vidas salvadas; 60.792 partos, niños y niñas que vinieron al mundo en brazos cubanos; se realizaron 10,7 millones de exámenes complementarios; en total hubo poco más de 3 millones de consultas oftalmológicas.
—Se dice que más estuvieron en Bolivia como un apoyo político a Evo Morales, como operadores políticos.
—Es tan ingrato, tan ruin y poco ético decir semejantes barbaridades. Queremos aclarar. Eso dijeron de la clínica de Achumani [implementada básicamente para atender a personal cubano en el país], que dijeron que era un búnker. Quedan mal los bolivianos, al mostrar ser ingratos. Si no les gusta (lo que hacemos), perfecto, nos vamos, como hicimos; pero qué sentido tiene confundir a un médico con un guerrillero, ‘no, que no son médicos, sino operadores políticos’. Y es que no tiene sentido, cuando uno va a un médico, le pregunta qué le duele, no por quién vota. ¿Usted sabe quién se llevaba bien con nosotros? Los alcaldes de derecha, y es que se está resolviendo un problema de la población. Cuando se enteraron de que nos íbamos, les han hecho hasta despedida a los médicos, a pesar de la premura.
—¿Tuvieron alguna muestra de hostilidad de la gente?
—Se sabe que robaron a los cubanos, dinero, en su detención, les dieron patadas en la espalda, asaltaron sus casas, desnudaron a dos médicos cubanos, a una mujer de 67 años. ¿Qué sentido tiene eso, esa hostilidad?
—¿Cuál es finalmente el mecanismo de cooperación en salud, por qué se dice que el Gobierno boliviano corrió con la cuenta del salario de los profesionales cubanos?
—Hasta 2012, [la colaboración en Bolivia fue casi desde 2006] llegaron a haber cerca de 3.000 médicos cubanos, no 700, fueron muchos más. Cuba lo pagó todo. Cada 45 días venía un avión de Cubana de Aviación a ver a los médicos, a llevarse a los que debían irse. Cuba dio 5.139 becas gratis a estudiantes bolivianos. Entre 2006 y 2012 hizo aportes a clínicas, el equipamiento para 45 hospitales comunitarios de 15 centros oftalmológicos, de ellos, 10 donados a Bolivia. De 2006 a 2012, Cuba sostuvo a la Brigada Médica, alquiler de casas y sus servicios, alimentación, estipendio mensual a todos los brigadistas, que no es salario, pagos de vehículos, etcétera… eso fue al principio. Pero qué pasó el 2012, la situación de Bolivia había mejorado muchísimo, estaba creciendo y creciendo. Y el presidente Evo Morales planteó que no estaba bien que Cuba, estando bloqueada, estuviese pagando todo con tantos colaboradores; por esa razón nos dijeron que vamos a cambiar esto. Evo dijo: El sostenimiento de la Brigada lo pagamos nosotros, de 750 brigadistas; a partir de 2013, los médicos cubanos no recibían salario, sino estipendio, para sobrevivir, 700, 800 dólares.
—¿Dónde se desplegaron los brigadistas cubanos?
—En lugares de riesgo, para atender el dengue, por ejemplo. Se luchó contra el dengue y otras enfermedades, se descubrió nuevos ratones; se hizo docencia e investigación científica, se ganaron premios con trabajos hechos en Bolivia, uno fue sobre la altura. Además, le voy a decir algo: hubo médicos cubanos que fallecieron aquí, un infarto. Por eso me duele tanto y no acepto que se hable mal de los médicos. No aplaudan, pero no tienen por qué criticar y denigrar de forma tan mentirosa y grosera. Eso deja mucho que desear de la gratitud, un valor humano.
—¿Qué es eso de la clínica para cubanos, el búnker que dijeron?
—Cuando usted tiene a cientos de médicos de su país, usted tiene que tener un centro de atención para ellos [la clínica El Colaborador]. Si teníamos tres mil misioneros, personal diplomático, todos se atendían allí. Como es gratis, y los médicos no podían estar de brazos cruzados esperando a un cubano, se atendió también a bolivianos, ahí están los agradecimientos, se atendieron clérigos importantes, actuales funcionarios a nivel de ministros de este gobierno, diplomáticos, generales; ellos dejaron los reconocimientos, tenemos las historias clínicas. La clínica era principalmente para cubanos, pero se atendió a bolivianos; debían funcionar los equipos. Se tenían apenas tres camas de ingreso, Traumatología, Ginecología, Rehabilitación, Terapia Intensiva, Intermedia. Le digo una cosa: Muchas de las consultas era para conocer una segunda opinión. Además, nosotros compramos esa propiedad, la compró un embajador a nombre del Estado de Cuba.
—Estamos en el peor momento. ¿Qué pasará ahora?
—Una cosa. A nosotros no nos sacaron. Nosotros nos fuimos, y nos fuimos por inseguridad. Y en cuanto a lo que pasará, hay que hacerles esa pregunta a las autoridades bolivianas, al pueblo de Bolivia; las relaciones están muy deterioradas, han dicho cosas salvajes, que la esposa del embajador participó en la quema de la casa del excretor Waldo Albarracín… cuando la esposa nunca estuvo aquí. Embajador no hay, por ahora. Nosotros hicimos lo que pudimos, pero no podemos seguir agredidos.
Erick Valdés. El miércoles 1 de enero, Cuba celebrará 61 años de su revolución, que logró la victoria sobre la dictadura de Fulgencio Batista justo el 1 de enero de 1959. Serán “nuestros primeros 61 años”, remarca el ahora exconsejero de esa legación diplomática en Bolivia.
Datos
Nombre: Erick Valdés Profesión: Diplomático.
Ocupación: Fue consejero y luego encargado de negocios de la embajada de Cuba en Bolivia; estuvo en el país cinco años.
Perfil
Como todo cubano, el ahora expansionarlo en primer lugar reivindica al “apóstol” de Cuba, el patriota, escritor, poeta y periodista José Martí.
Iván Bustillos es periodista de La Razón