Lourdes Pacheco Alave, la mujer que fue acusada sin pruebas de haber plagiadora a la bebé Samanta, anunció el inicio de un proceso contra el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, por difamación e injuria. Murillo se disculpó a través de un comunicado y pidió centrarse en la búsqueda de la menor.
“Había esperado (disculpas personales) del ministro Murillo, pero ahora estoy haciendo legalmente las cosas, como no me ha llamado, no me ha hecho buscar nada, entonces yo también tengo que ver los recursos para alimentar a mis hijos, no tengo donde dormir, nada, por eso estoy siguiendo legalmente este caso”, anunció.
Murillo será denunciado por los delitos de calumnia e injurias. Pacheco Alave contrató los servicios del abogado Frank Campero, quien informó que también pedirá el resarcimiento por los daños provocados a su cliente.
“El ministro cometió calumnia e injuria y la señora está estigmatizada ante la sociedad, sus disculpas a través de un comunicado no son suficientes. La señora Lourdes quiere que judicialmente el ministro resarza los daños”, explicó Campero.
La noche del viernes, Pacheco Alave pidió a Murillo “tener pantalones y disculparse” públicamente por el error que cometió.
“Yo le pido al señor Murillo, errar es de humanos, pedir disculpas. Que se sienta de pantalones y que pida disculpas, como yo he tenido el valor, como mujer, como madre que soy, de ir a la FELCC (Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen) voluntariamente; que se sienta hombre, que sea valiente, así como a denigrado mi nombre, mi apellido también que sea valiente en salir en redes sociales con mi foto y su foto y pedir disculpas”, desafió en la red Uno.
El miércoles, en conferencia de prensa, el ministro dio a conocer la existencia de una fotografía de la que sería la autora del rapto de la bebé Samanta. Se hizo viral en redes sociales y la mujer de la fotografía se presentó en la Policía, negando alguna participación en el hecho que conmovió a la sociedad.
Una desconocida robó con engaños a la niña. Se ganó la confianza de la progenitora de 19 años, contándole que tenía problemas en su casa. Le pidió que le comprara en la farmacia un medicamento, aprovechó ese momento y huyó junto a la bebé.