Por casi una década, Denis Racicot ocupó el cargo de representante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH-Bolivia). Ahora, al término de su gestión, se despide de este país con agradecimientos al Gobierno boliviano, a la comunidad internacional y a su equipo, quienes hicieron posible su trabajo.
“Llegué por primera vez a Bolivia en 2008 y ahora me iré en 2017. En esa época, este país era muy diferente del que es ahora, porque hubo muchos avances en derechos civiles y políticos”, dijo y concluyó que los temas del derecho al agua, la Madre Tierra, de los pueblos indígenas y las tradiciones fueron un gran aporte para su oficina, como también el proceso de cambio que generó una intensa dinámica económica, política y social.
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, resaltó el compromiso que tuvo Racicot por el desarrollo de los pueblos.