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Padres de familia afines al MAS intentaron tomar sede de maestros, hay heridos

Los padres de familia simpatizantes con el Gobierno del presidente Evo Morales intentaron tomar la Sede Social del Maestro, situada en la calle Genero Sanjinés entre Ingavi, lo cual generó la reacción de los profesores que se enfrentaron contra este sector que busca levantar el paro general indefinido en demanda del incremento salarial del 12 por ciento.

El secretario ejecutivo de la Federación del Magisterio Urbano, José Luis Álvarez, acusó al Gobierno y al diputado Juan Choquetarqui de organizar a los padres de familia contra el Magisterio. «Así como planificaron el enfrentamiento entre mineros asalariados y cooperativistas en Huanuni que dejó 16 muertos y en el caso de Caranavi que dejó dos muertos».

«El ministro Aguilar miente porque no nos convocó al dialogar desde el domingo, lunes y martes. Y ahora a esperado que haya enfrentamientos entre y padres de familia y maestros. Esa es la política del gobierno del fascismo masista, esa es la política hipócrita del MAS de hacer pelear entre pobres para pretender imponer y continuar aplicando su política neoliberal de destruir a las familias a través de sueldos de hambre», dijo.

«Los responsables de que hayan maestros y padres de familia heridos y contusos son el ministro de educación, Roberto Aguilar y el gobierno, fundamentalmente Álvaro García Linera, quien igual como hizo en Huanuni cuando le advirtieron los mineros asalariados sobre el enfrentamiento con los cooperativistas por su negligencia ahora nos enfrenta entre pobres», sostuvo.

Álvarez relató que los padres llegaron a bordo de vehículos, con megáfonos, amplificación, bien equipados, en busca de ingresar por la fuerza a la Casa Social del Maestro, pero los maestros frenaron esa acción y se produjo el enfrentamiento, lo cual dejó a varias personas contusas.

«No van a poder quemar nuestras casas porque vivimos como inquilinos los profesores Soruco, Plata y Álvarez, van a dañara gente inocente», dijo el dirigente, al señalar que la vigilia será permanente en las sedes de La Paz y El Alto, por lo que masificarán las defensas.

Anunció que los maestros volverán a paralizar el tráfico vehicular a las 15.00 en la sede de gobierno y que las movilizaciones continuaran inalterables en demanda de un salario justo.

Por su parte, el dirigente del magisterio, Severo Apaza, informó que se resguardará la sede del maestro en El Alto ante una nueva agresión planificada y dirigida desde el gobierno en busca de generar miedo y fracturar a la dirigencia y a las bases.

Apaza pidió, también, al gobierno aprobar un Decreto Supremo para frenar los cobros irregulares que realizarían los padres de familia por concepto de recojo de libretas que oscila entre 50 a 200 bolivianos.