SURGEN DUDAS SOBRE EL DECESO DE UN DETENIDO
Caso. Según la Policía, la muerte fue súbita, pero la familia denuncia abusos
Uno de los dos sospechosos de participar en el atraco a la oficina de Vías Bolivia, David Olorio Apaza, falleció en celdas de la fuerza anticrimen de El Alto. La Policía informó que la muerte fue súbita, mientras que la familia asegura que el detenido fue abusado en el interrogatorio.
El acusado fue detenido la noche del martes 6 junto a su concubina, Carola Cristina Céspedes, en su casa de Achachicala. Ambos, según el informe policial, fueron identificados por los testigos del atraco y figuraban como los principales sospechosos del asalto a la oficina de Vías Bolivia, en el peaje de la autopista. Aquel día, domingo 4 de julio, murió a tiros el guardia Leonardo Condori y los delincuentes se llevaron Bs 350 mil.
Tras su detención, se vio a Olorio Apaza (40) caminar sin dificultad cuando ingresó a las celdas de la FELCC. La imagen publicada en el margen superior izquierdo de la fotografía principal de esta página muestra su rostro sin lesiones, luego de ser aprehendido. En otra foto a la que accedió ayer La Razón, se ve al fallecido con moretones en el ojo, la oreja y el hombro derecho, además de un hinchazón (foto de abajo).
Las autoridades policiales afirmaron, por separado, que la muerte de Olorio Apaza fue súbita y que se debió a un paro cardiaco. «Él se cayó de bruces, el oficial que estaba ahí no pudo sostenerlo y sufrió convulsiones. Se golpeó parte de la cara con el piso», explicó a este diario el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de El Alto, coronel Israel Vega, consultado sobre los moretones de Olorio Apaza.
Asimismo, aseguró que tras sufrir las convulsiones, tres policías lo alzaron para intentar subirlo a un vehículo, pero Olorio tropezó. «El protocolo de la autopsia dice que no hay heridas de ningún tipo que haya producido la muerte», manifestó el jefe policial.
Por la mañana, el director de la FELCC de La Paz, coronel Rosalío Álvarez, informó de que hay datos en sentido de que Olorio Apaza habría sufrido una insuficiencia cardiaca minutos antes de su deceso.
La fiscal del caso, Verónica Villegas, sostuvo que en la autopsia «no se encontró ningún tipo de lesiones y la muerte fue súbita». Pero los familiares del acusado aseguraron que él no tenía antecedentes cardiacos.
«No confiamos en esta autopsia. Él era un hombre sano, no tenía enfermedades. Pensamos que le dieron un golpe certero y falleció. No pudo aparecer muerto en una noche si estaba bien», señaló la tía política del fallecido, Constancia Céspedes. En ese sentido, dijo que pedirán otro examen con un forense particular.
La pareja de Olorio Apaza presenció la autopsia de su compañero en la morgue judicial. Ella indicó que era injusto y que la Policía cada vez lo acusaba por los antecedentes delictivos que tenía. El comandante de la Policía, general Óscar Nina, descartó que Olorio Apaza haya sido golpeado por los policías.
«Tengo información de que no existe eso. La brutalidad es ejercicio de una fuerza fuera de lo común y el señor tuviera que tener algunos vestigios en el cuerpo», dijo. En declaraciones a ATB, dijo que en 10 días se determinará las causas de la muerte del detenido.
Con relación a la seguridad de los policías, Nina anunció a Erbol que dotarán de chalecos antifragmentarios, pero no chalecos antibalas.
El fiscal de Distrito de La Paz, Williams Dávila, informó que se abrió una investigación de oficio en el Ministerio Público para determinar las causas de su muerte en las celdas de la FELCC de El Alto.
Concubina es enviada a la cárcel
Dictamen
Carola Cristina Céspedes, concubina de Olorio Apaza, fue enviada la tarde de ayer al Centro de Orientación Femenina de Obrajes, por ser considerada una sospechosa del asalto en las oficinas de Vías Bolivia el domingo 4.
Avances
El comandante nacional de la Policía, general Óscar Nina, afirmó que la investigación del atraco a Vías Bolivia está adelantada y que en cualquier momento se tendrán noticias referidas a este caso.
Denuncian excesos en la detención
Los familiares de David Olorio Apaza y Carola Cristina Céspedes, vinculados al atraco a las oficinas de Vías Bolivia, denunciaron que en su detención los policías los golpearon, destrozaron su casa y enmanillaron a dos de sus hijas.
«Han entrado a la vivienda rompiendo la puerta. Todo fue a golpes. A ellos (Olorio y Céspedes) también los pegaron. A las hijas de mi sobrina las habían esposado y se los han llevado (a la pareja) a golpes», relató ayer a La Razón la tía de la detenida, Constancia Céspedes. Ella se encontraba en la puerta de ingreso a la morgue, donde se practicaba la autopsia al cadáver de Olorio Apaza.
Carola Céspedes, por su parte, declaró que los policías golpearon a su concubino y que le molestaban porque tenía antecedentes penales.
Constancia Céspedes dijo que desde hace dos años que Olorio Apaza trabajaba como chofer y había dejado la delincuencia. Añadió que su sobrina Carola nunca estuvo en la cárcel y que sólo era la compañera del ahora fallecido. Aseguró que su sobrino político le comentaba que los policías le perseguían constantemente, pese a que él se estaba reformando y ya no cometía actos delictivos.