Los egipcios huyen de El Cairo hacia Las Ramblas
En pleno desierto se levanta un paisaje similar al de Barcelona
A unos kilómetros de El Cairo, en pleno desierto, se construye una exclusiva ciudad con un paseo inspirado en Las Ramblas de Barcelona y destinada a egipcios ricos, cansados del ruido y la contaminación de la ciudad más poblada de África.
«Paseando una tarde de verano por el bulevar central te sentirás en el centro de una ciudad llena de vida», promete la publicidad de Westown, una ciudad diseñada para acoger a 60.000 residentes y varios miles de oficinas y comercios que toma forma en la carretera que une El Cairo con la ciudad mediterránea de Alejandría.
Para el director ejecutivo del proyecto, Markus El Katsha, la capital egipcia con sus 20 millones de habitantes es «una ciudad maravillosa pero atravesada por vías rápidas, con un deficiente transporte público, una inadecuada red de calles y una ausencia de espacios públicos e infraestructuras».
«Quien ama El Cairo sabe que esta ciudad no puede seguir creciendo del mismo modo», agrega El Katsha en una entrevista con EFE mientras señala el faraónico diseño para una «urbe sin muros en la que se moverán diariamente dos millones de personas» y que espera empezar a ser una realidad dentro de diez años. Golpeados por el viento y el sol, decenas de trabajadores ganan terreno al desierto.