Un pez salva el ecosistema que destruye el hombre
El gobio barbudo es el principal sustento de otras especies

Un pequeño pez de sólo 13 centímetros de largo que vive en la costa de Namibia, en el suroeste de África, logra salvar un ecosistema dañado por el hombre al convertirse en el principal sustento de otras especies tras la desaparición de las sardinas por la sobrepesca.
El gobio barbudo (Sufflogobius bibarbatus) ha prosperado en una zona muerta del océano donde escasea el oxígeno y se alimenta de las medusas que proliferaron al desaparecer las sardinas, según los científicos noruegos, sudafricanos y namibios que estudiaron su adaptación y supervivencia.
«Este superpez ilustra cómo los animales se pueden adaptar para hacer frente a un cambio dramático en el medio ambiente» como es la proliferación de las medusas, que son un grave problema porque comen pequeños peces y otras criaturas marinas pero tienen pocos depredadores, dijo la bióloga Victoria Braithwaite, quien es parte del equipo internacional de investigadores que publica los resultados de su estudio en la revista científica Science.
Curiosidad. La científica explicó que el objeto de la investigación era averiguar por qué la población de gobios aumenta pese a lo inhóspito de su entorno y a haberse convertido en la principal presa de merluzas, jureles, pájaros y mamíferos marinos tras la desaparición de las sardinas.
«Resulta que los gobios tienen una increíble capacidad de mantenerse sin oxígeno durante varias horas seguidas y que también pueden nadar sin inmutarse en medio de un enjambre de medusas, algo que la mayoría de los peces evita», explicó la especialista.
Estos peces pasan gran parte del día en el lodo del fondo del océano, a entre 20 y 60 metros de profundidad, donde los niveles de oxígeno son inferiores al 10 por ciento de lo normal y sus depredadores no pueden llegar.