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39 albergues SOS corren riesgo en El Alto

Los ejecutivos de Aldeas Infantiles SOS de Sudamérica y Bolivia advierten que si se consolida la toma de su Centro Social en El Alto de la zona  Bautista Saavedra se cerrarán los 39 albergues que funcionan en esa ciudad y que son administrados por esta organización.

«Nos queremos quedar en El Alto y lo vamos a seguir haciendo hasta que nos echen. Esta (toma) es una forma de hacerlo y pone en riesgo los 39 centros, porque nos quitan un medio importante para poder seguir trabajando», dijo el director Nacional de Aldeas SOS, Alfonso Lupo Flores.

Paralelamente, los padres y madres sustitutas de 1.600 niños beneficiados por los programas Manitos y de capacitación de padres anunciaron bloqueos y movilizaciones desde el lunes en calles, avenidas y accesos de esa ciudad en defensa de las instalaciones de Aldeas SOS.

El domingo 12 de septiembre, vecinos de Bautista Saavedra, encabezados por Rufo Huaycho, tomaron por la fuerza las instalaciones de la ONG construidas en esa zona sobre una extensión de 590 metros cuadrados con el argumento de que en el terreno —de propiedad municipal, pero entregado en comodato a SOS— debía construirse un hospital para la zona.
 «Sacaron por la fuerza a niños y mujeres; pusieron candados y cadenas a las puertas», denunció Lupo.

El principal ejecutivo a nivel de Sudamérica de esta organización, Wálter Cadima, dijo que al afectar el trabajo del Centro Social se atacó directamente «al corazón de todo el centro» porque en esta área se realizan las tareas logísticas que sustentan a los 39 albergues que funcionan en 10 distritos de la urbe alteña.

«No se puede concebir el funcionamiento de todas las partes si es que falta uno de sus componentes. Además, es el lugar donde más niños se recibe (121), no sabemos dónde están ellos que en su mayoría son los hijos de comerciantes», enfatizó Lupo Flores.

Aldeas SOS en El Alto tiene como a su principal socio al municipio con el que ejecuta de forma directa el programa Municipal Manitos. El terreno fue cedido en comodato por un lapso de 20 años el 2005 y finaliza el 2025. La organización construyó la infraestructura donde funciona el Centro Social.

SOS califica la actitud de los vecinos como un atentado contra los derechos de los niños de El Alto. Sus ejecutivos afirman que las acusaciones vertidas, sobre un supuesto mal manejo administrativo y una selección privilegiada de los beneficiados, son infundadas y falsas.

«Estamos dispuestos a someternos a auditorías y a todo lo que se nos exija. Éste es un movimiento que sólo quiere generar una mala imagen con acusaciones que no tienen ningún tipo de asidero», agregó Lupo. La solución está en manos del alcalde de El Alto, Édgar Patana, pero esta autoridad aún no se pronuncia.

Para Aldeas SOS, la autoridad municipal tiene que hacer prevalecer el principio de derecho y buscar una solución inmediata porque hay un grupo de niños que ha quedado desprotegido por la paralización de las actividades del Centro Social.  Los ejecutivos aseguran que sostuvieron dos reuniones con los dirigentes de la junta vecinal.

«Estamos agotando todo lo que está a nuestro alcance. Nosotros no podemos negociar el derecho de unos niños, sin embargo, podemos escuchar las necesidades de los vecinos e incluso coadyuvar y hacer gestiones para que ellos tengan un centro médico y social en su zona», agregó Lupo.

Los padres de los niños afectados, ayer se manifestaron en puertas de las oficinas de SOS en Sopocachi. Declararon que respaldan a la organización y anunciaron para el lunes movilizaciones y bloqueo de los principales accesos y avenidas a la ciudad de El Alto.

El Centro Social

El Centro Social de Aldeas SOS de El Alto acoge a 121 niños menores de seis años y brinda asistencia integral, alimento y ropa a las madres, y apoyo sociopsicológico a sus familias.  

Avasalladores, sin norte

Los representantes de Aldeas SOS recibieron diferentes razones de los dirigentes de la Junta Vecinal Bautista Saavedra para justificar la ocupación de los predios donde funciona dicha ONG.

El presidente de la Junta Vecinal Bautista Saavedra, Rufo Huaycho,  aseveró en primera instancia que la toma del edificio era para la creación de un centro para atender a las personas de la tercera edad. En otra declaración brindada el martes dijo que se busca la construcción de un hospital de segundo nivel para la atención del materno infantil.  

Sin embargo, en la última reunión que sostuvo con los ejecutivos de Aldeas SOS y mediadores del Defensor del Pueblo, Derechos Humanos y la Federación de Juntas Vecinales, el jueves, argumentó que el terreno serviría para el uso de la Subalcaldía y la junta vecinal de su barrio.

Esta postura fue ratificada ayer por el dirigente de la zona Saúl Juchani, quien señaló  que la infraestructura servirá para instalar las oficinas de la Subalcaldía. «Queremos darle una verdadera función social a estos predios y que no beneficie a pocos», argumentó Juchani.

El director Nacional de Aldeas SOS, Alfonso Lupo Flores, señaló que en el contrato de comodato con el Municipio se establece que en caso de que se retiren de El Alto, la infraestructura del Centro Social debe destinarse exclusivamente a la población infantil.