Noemí Chura (17) cursaba el tercero de secundaria en Coroico. Ayer abordó un minibús que le llevaría hasta su colegio Cruz Loma, pero en el camino el vehículo se embarrancó 50 metros. La joven resultó herida y al ser llevada a un nosocomio, murió.
El vehículo partió a las 6.00 de la localidad Santiago Grande con destino a Coroico, pues ése era el recorrido, de aproximadamente 40 minutos, que hacía diariamente recogiendo en el camino a los colegiales que se dirigían a su establecimiento. El motorizado llevaba el logo de la empresa de transporte interprovincial Turbos Totaí y no cuenta con el Seguro Obligatorio Contra Accidentes de Tránsito (SOAT).
El hecho ocurrió a las 6.30, cerca de la población de Cruz Loma. El vehículo llevaba 20 personas, de las cuales 18 resultaron heridas.
El conductor, Eusebio Huanca (35), y Zulma Calizaya (18) fueron los más afectados y se los trasladó al Hospital de Clínicas de La Paz. El chofer presenta una fractura en la mandíbula inferior y la joven, una fractura en el brazo y lesiones en su columna vertebral. Los otros 16 pasajeros fueron atendidos en el Hospital Universitario de Coroico y horas después los médicos les dieron de alta.
Sin embargo, Noemí tenía lesiones graves en el pecho y en la cabeza. Cuando estaba a punto de llegar a Coroico para ser atendida por los galenos perdió sus signos vitales, según el primer reporte médico.
Las causas del accidente no fueron esclarecidas aún. Comunarios de Santiago Grande contaron que el miércoles vieron al chofer cuando consumía bebidas alcohólicas. El resultado del alcoholtest se conocerá hoy, según el reporte del Organismo Operativo de Tránsito.
Al no contar con el SOAT, ninguna empresa aseguradora correrá con los gastos de hospitalización y curación de los dos heridos. La madre de Zulma Calizaya pidió ayer a los ciudadanos que le colaboren con dinero o medicinas para que su hija sea atendida.
Un reporte médico dio a conocer de que los dos heridos necesitan cubrir gastos de radiografía y otros exámenes neurológicos. Asimismo, solicitaron calmantes y materiales como gasas y yeso para inmovilizar algunas partes del cuerpo, si fuera necesario.
Un empleado de la empresa Turbos Totaí informó ayer a La Razón de que el vehículo accidentado ya no pertenece a esa línea desde el 2008, año en que su propietario renunció.
«Ya no es de la empresa, pero nos enteramos de que seguía con el letrero de Turbos Totaí. Tal vez por eso ni siquiera contaba con el SOAT. El administrador está en los trámites para presentar una denuncia contra él por seguir utilizando nuestro logo», afirmó ayer el empleado de la línea, quien se identificó como Pablo.
De los otros 16 colegiales lesionados y datos de alta en Coroico sólo se identificó a nueve: Kenia Durán, Mónica Arteaga, Agustina Huanca, Wendy Huanca, Abel Huanca, Jovel Larico, Griselda Chura, David Tapia y Jesús Tapia.