La Paz – Los municipios de La Paz y Mecapaca instalaron sus subalcaldías en Mallasa, que están a dos cuadras de distancia una de la otra, y ofrecen a los vecinos tramitar licencias de funcionamiento, pago de tributos a inmuebles y vehículos.
Cada una tiene el mismo objetivo: sentar soberanía sobre Mallasa y dar una señal a los ciudadanos de que el territorio en el que viven pertenece a uno de los dos municipios que disputan la jurisdicción.
Otra de las estrategias de la munipalidad de La Paz es de dar una señal de presencia a través de la ejecución de obras. Sin embargo, para el gobierno edil de Mecapaca trabajos —como el asfaltado de la avenida principal— son parte de un convenio no escrito entre la Alcaldía paceña con los vecinos.
«Antes, depositaron grandes cantidades de basura en el antiguo relleno. A cambio, hicieron el asfalto de la avenida y algunas construcciones», dijo el alcalde de Mecapaca, Plácido Huanca. La autoridad, además, denunció que los recursos de coparticipación tributaria que destina el Gobierno a cada Alcaldía —por determinado número de población— son captados por La Paz.
Estos recursos provienen del Tesoro General de la Nación y no son divididos por zonas. El dinero se entrega a la Alcaldía de La Paz por la población total. En el caso de Mallasa, se toma en cuenta desde el puente de Lipari, pasando Jupapina. Por su parte, el subalcalde por La Paz, Miguel Quispe, expresó que «somos respetuosos de las normas y mientras esté vigente cumplimos nuestra misión de administrar (el territorio) conforme a la Ley 2028».
Pacto. Pero en Mallasa el conflicto limítrofe no se siente, porque existe un acuerdo tácito entre ciudadanos y alcaldías para no presionar la definición de los límites. El Alcalde de Mecapaca manifestó que «el tema de los límites está en controversia. (La Paz) ni nosotros haremos algo hasta que se definan. (Mientras suceda) daremos licencias de funcionamiento».
Quispe, al respecto, indicó que «Sin ánimo de ofender, dan (las licencias) sin exigir ningún requisito. La Paz tiene su reglamento y lo hacemos cumplir».
El dirigente del Sindicato de Comercios de Mallasa —que tributa en Mecapaca— Luis Samanamut, expresó que «cada uno puede pagar como lo estuvo haciendo y no pagar doble».
La Alcaldía de La Paz busca persuadir
La Alcaldía de La Paz descarta utilizar mecanismos coercitivos para que los propietarios de los comercios de Mallasa regularicen su situación. En cambio, los invita a conocer los beneficios del reglamento de expendio de bebidas y alimentos cuya última modificación fue aprobada este año.
Los comerciantes, a su vez, procuran conformar una asociación con mayor representación «para evitar abusos» , dicen, de ambas alcaldías y buscar la definición de los límites entre municipios de La Paz y Mecapaca.
El subalcalde de Mallasa por La Paz, Miguel Quispe, informó que se preparan seminarios para «hacer conocer nuestro reglamento y los requisitos para el funcionamiento de otras actividades económicas, como las tiendas».
Después de los cursos «de manera respetuosa, vamos a pedir que ellos (los propietarios de los comercios) tengan su licencia de funcionamiento para tener una actividad legal y no ser informal».
Por su parte, el dirigente del Sindicato de Comercios —que tributa a la Alcaldía de Mecapaca— Luis Samanamut, señaló que están en conversaciones negocios con Mallasilla y Jupapina. El objetivo es «hacer un solo sindicato para enfrentar a cualquiera de las alcaldías y con el tiempo definir la jurisdicción». Quispe espera que autoridades de Mecapaca garanticen que los alimentos que se ponen a la venta tengan control.
Pausa en la definición de límites
Los procesos para la definición de los límites entre La Paz y Mecapaca están paralizados en la Gobernación de La Paz. Ambos trámites esperan la aprobación de una nueva ley que establecerá los parámetros para determinar la jurisdicción de ambos municipios y de otros en el resto del país.
La disposición transitoria décima sexta de la Ley Marco Marco de Autonomías dispone: «Suspender temporalmente la admisión de nuevas solicitudes de creación, delimitación supresión y/o anexión de unidades territoriales hasta 180 días posteriores a que se dicte una nueva normativa». La próxima ley recibirá el nombre de Unidades Territoriales y reemplazará la de Unidades Político-Administrativas (UPAS).
Con el cambio, todos los procesos, como los que siguen La Paz y Mecapaca para la definición de límites deberán reencaminarse. El Ministerio de Autonomías espera que la nueva ley sea aprobada en un mes.