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Médicos tratan de salvar la vida de bebé con septicemia

Un bebé recién nacido lucha por vivir en el Hospital del Niño, ubicado en la zona de Miraflores, donde los galenos indicaron que hacen todo lo que está a su alcance para mejorar el estado de salud del menor. El diagnóstico médico establece que el niño padece de una fulminante septicemia y que no se sabe en qué circunstancias la contrajo.

El jefe de piso de Terapia Intensiva en la unidad de Neonato del mencionado nosocomio, Manuel Pantoja, al realizar una evaluación de la situación del menor, dijo que las condiciones de salud en que llegó «fueron delicadas».

La valoración médica realizada el día de la internación, 30 de septiembre, fue que el menor presentaba hiperbilirrubinemia y deshidratación, lo que le habría provocado un trastorno de alimentación. A ello se suma que el niño ingresó en un cuadro de «inmunodeprimido».

De todas maneras, se solicitará la realización de una auditoría médica para determinar las causas y circunstancias de la infección del bebé, cuya vida corre peligro.

SITUACIÓN. Todas estas circunstancias condicionaron para que el niño «esté susceptible» a cualquier infección, explicó el especialista. La madre del niño, Zulema Solís, en medio de llanto, exigió que los médicos le den toda la atención necesaria para que su hijo sobreviva.

Según Pantoja, el recién nacido está recibiendo toda la atención necesaria. Aclaró que no es el único caso que atienden en Terapia Intensiva, porque hay menores con otra serie de dificultades de salud.

«Mientras exista una esperanza de vida, los médicos tenemos la confianza de que el paciente salga de este cuadro difícil», sostuvo el galeno.  Los médicos del Hospital del Niño aguardan la evolución del cuadro clínico para realizar el tratamiento. Asimismo, se analiza la posibilidad de realizar una campaña.

La septicemia es la infección aguda con manifestaciones tóxico-sistémicas, ocasionadas por la invasión y proliferación de bacterias dentro del torrente sanguíneo y en diversos órganos que ocurre dentro de las primeras cuatro semanas de vida y es demostrada por un hemocultivo positivo, que es un estudio que se realiza en el centro médico.

Los gérmenes invaden la sangre a partir de varios sitios, siendo los más frecuentes en el neonato las infecciones del aparato respiratorio digestivo y la piel.  La enfermedad se expresa en deficiencia respiratoria, vómitos, diarrea, distensión abdominal, fiebre, temblores, convulsiones y cambio en la pigmentación en la piel.

Tratamientopara el mal

Al paciente se le debe suministrar líquidos por vía intravenosa (IV) para mantener la presión arterial. Se puede administrar plasma y hemoderivados, además de antibióticos.