El departamento de Santa Cruz reportó los dos primeros decesos del año con síntomas del dengue. De confirmarse, la cifra de víctimas mortales por esta enfermedad se elevaría de 13 a 15 en todo el país.
«Si bien una prueba rápida descarta que las muertes sean por dengue, yo prefiero esperar el resultado del análisis especializado del Cenetrop (Centro Nacional de Enfermedades Tropicales)», afirmó Joaquín Monasterios, director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Santa Cruz.
Monasterios confirmó que los síntomas que terminaron con la vida de las dos personas son similares a las de la enfermedad del dengue. «Uno de los fallecidos vivía en Montero, el otro era un niño que en primera instancia fue atendido en un hospital privado donde parece que hubo un mal manejo del problema», manifestó.
De confirmarse que los decesos fueron por dengue, el número de fallecidos por esta enfermedad en todo el país sería de 15, desde diciembre. Los dos primeros casos se reportaron en La Paz, en diciembre del 2010. En Trinidad-Beni murieron 11 personas, entre ellas, una joven embarazada. Los médicos lograron salvar la vida del bebé.
Monasterios no descartó que debido a las intensas lluvias que afectan a gran parte del país y también a Santa Cruz, se incremente el número de casos de enfermos. Señaló que, a la fecha, en la capital cruceña son 199 los casos confirmados y 710 los sospechosos.
Según el Sedes, el 86 por ciento de los casos pertenecen a la ciudad capital y el resto, a las provincias. Roberto Tórrez, jefe de Epidemiología del Sedes, declaró que los municipios más cercanos a la capital cruceña, como La Guardia, Warnes y Montero, presentan un mayor riesgo.
El director departamental del Sedes advirtió que una señal de que se está incrementando el número de casos es que en no más de siete días se registró un significativo aumento de casos confirmados.
Datos del Sedes dan cuenta que el miércoles 9 de febrero, los casos confirmados eran de 107; el martes 15, subió a 170; y ayer, el número de casos llegaba a 199.
Por esta razón, la Gobernación de Santa Cruz, a través de sus diferentes programas y direcciones departamentales, retomó la campaña de información prevención de la enfermedad, además de la fumigación, con 14 equipos pesados.
El responsable departamental del Programa Dengue, Virgilio Prieto, informó que la determinación fue asumida tras haber evidenciado que el grado de infestación de larvas del aedes aegypti, que es el virus transmisor de la enfermedad, se incrementó notoriamente en las viviendas.
Al momento, las autoridades locales declararon la alerta roja y se destinó un presupuesto extra para contratar más personal de salud y de esta manera evitar que el dengue se convierta en una epidemia.
Casos de dengue en Beni
En el departamento del Beni, se registraron 4.000 casos, según la estadística del Sedes de ese departamento, que incluye a los casos confirmados y sospechosos. A la fecha, continúa el monitoreo de la epidemia.
San Buenaventura y Palos Blancos, anegados
Luego de que una riada provocó perjuicios en Quime, los municipios de Palos Blancos y San Buenaventura declararon alerta roja y reportaron que la crecida del río Beni anegó cultivos y provocó daños aún no cuantificados, informó el gobernador César Cocarico.
«Hay inundaciones en el municipio de San Buenaventura y Palos Blancos (norte de La Paz). Esos son los dos casos que más nos preocupan en este momento», dijo la autoridad. El asambleísta Horacio Medrano explicó que «después de la inundación en Quime, el viernes pasado, el agua bajó y anegó Palos Blancos, el lunes».
Cocarico adelantó que una comisión evalúa la zona afectada para conocer el impacto. Sin embargo, Medrano adelantó que se trata de 1.500 familias de 50 comunidades de Palos Blancos las que perdieron cultivos de banano de exportación, arroz y yuca.
En Oruro, las pérdidas llegan a Bs 10 millones
Las pérdidas provocadas por la inundación de sembradíos y viviendas, además de la muerte de ganado ovino y camélido en los municipios Chipaya, El Choro y Machacamarca de Oruro, ascienden a cerca de Bs 10 millones.
El dato fue oficializado por las autoridades de la Gobernación de Oruro, quienes indicaron que al momento se realizan los trabajos para contrarrestar los efectos de los fenómenos naturales.
«Según el informe de la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR), el principal impacto es al sector productivo, ya que se perdieron cientos de hectáreas de quinua y de alfalfa; el cálculo del daño es de 10 millones de bolivianos», afirmó el secretario General de la Gobernación, Édgar Sánchez
Agregó que se emitirá un decreto regional de excepción para llegar con vituallas, alimentos, fármacos y semillas a las familias.