Los bolivianos que trabajaban en condición de servidumbre y explotación en una quinta a 20 kilómetros de Mar del Plata, en Argentina, prestaron hoy sus declaraciones a la Fiscalía de ese país y fueron albergados en oficinas de rescate del Ministerio de Justicia, informó a La Razón Digital vía teléfono Gustavo Vera, representante de la Fundación La Alameda, organización no gubernamental que denunció la situación.
Este lunes, un operativo en el que participaron más de 300 personas allanó la finca Compañía Frutihortícola S.A, conocida como «El Frutillar». En la batida se detectó que en el lugar trabajaban en condiciones de explotación migrantes bolivianos, entre ellos varios menores de esta nacionalidad, y argentinos de Santiago del Estero y Salta.
«Se halló a grupos familiares incluidos los chicos, en condiciones bastante miserables sin ropa de trabajo adecuadas, sin medidas de seguridad e inclusive con agrotóxicos al alcance de la mano como el bromuro de metilo», dijo Vera.
«La gente fue sacada de este lugar y en este momento está dando sus testimonios y contando en el juzgado las situaciones que vivían. Hay varios voluntarios de la fundación entre los trabajadores que quisieron declarar lo cual da una pauta que están denunciando la situación a la que estaban sometidos.
Patricia Gordon, una integrante de la Fundación Alameda, dijo que en el lugar allanado había unas 200 personas, entre bolivianos y argentinos.
«En conclusión digamos que se encontraron en El Frutillar personas indocumentadas, menores de edad, viviendo en condiciones deplorables y de hacinamiento», dijo vía teléfono a La Razón Digital.
El cónsul general de Bolivia en Argentina, Ramiro Tapia, aseguró que se hizo «de inmediato» un seguimiento del caso y que un abogado de la legación se trasladó hacia la zona para recabar la información necesaria.
«Hemos hecho un seguimiento al caso, de forma inmediata nos hemos comunicado con el fiscal asignado al caso y son aproximadamente 170 personas, la mayor parte con documentación, exceptuando muy pocas que no».
Agregó que se conoce, aunque no oficialmente, que el 90 por ciento de los bolivianos que trabaja en el lugar tiene su documentación migratoria al día.
Tapia dijo que hasta este miércoles se espera que la Fiscalía envíe al Consulado la información de las investigaciones y la lista con las personas encontradas.
«Por supuesto nosotros que siempre vamos a vigilar en primer lugar los derechos humanos de nuestros compatriotas».
El operativo
El operativo del lunes fue ordenado por la justicia argentina luego de que Vera, en representación de Fundación La Alameda, presentara una denuncia formal a la Fiscalía contra tres fincas del lugar.
Además de El Frutillar fueron denunciadas «Quinta Costa Mari» y «Quinta Rueda», ubicadas entre Batán y Sierra de los Padres, cercanas a Mar del Plata.
Los campos ubicados a 20 kilómetros de Mar del Plata, en el partido de General Pueyrredón, en el cordón frutihortícola de Sierra de los Padres y Batán son considerados uno de los centros de producción frutihortícola más importante del país, que distribuye su producción en el mercado Central y para la exportación, según el periódico La Capital.
Pese al pedido, la justicia sólo ordenó intervenir El Frutillar. Para respaldar la denuncia, Vera entregó a la Fiscalía General fotografías y videos grabados gracias a cámaras ocultas y testimonios con identidad reservada.
El representante de la fundación consiguió la información luego de disfrazarse junto con otras personas como reyes magos, lo que les permitió ingresar el 8 de enero a las fincas y constatar la precaria situación en la que trabajaban los bolivianos.
Junto con Vera entraron varios militantes de la Fundación Alameda, Madres de Plaza de Mayo e Hijos de Mar del Plata. La excusa fue que el grupo estaba formado por personas voluntarias que llegaba al lugar para dar regalos a los niños con motivo del día de reyes.
Vera comentó que en la zona operan al menos unas 50 quintas y fincas que someterían a su personal a trabajo esclavo.