El primero adelantó que entablará una querella en contra de Illanes, acusándolo de daños y robo al edificio de la sede sindical del rubro, y de difamación en contra de su persona. El segundo respondió que será él quien presente una demanda por actos de corrupción en los que estaría implicado Rocha, que detenta por más de 10 años la dirigencia de los gremialistas.
La pelea comenzó el 22 de febrero. Según Illanes, en aquella ocasión se reunieron 350 organizaciones, de las 400 que existen en El Alto, y lo hicieron a convocatoria del comité ejecutivo de la Federación de Gremiales.
Allí se nombró a Illanes como ejecutivo de esa organización. La nueva autoridad comentó a La Razón que el evento fue convocado por el comité ejecutivo y no por Braulio Rocha, porque estaban cansados del prorroguismo del dirigente.
Pugna. Sostuvo que éste asumió el cargo en agosto del 2005 por un periodo de tres años, que feneció en agosto del 2008. Pero Rocha no convocaba al congreso gremial, para renovar la secretaría ejecutiva, con diversos argumentos. El resultado fue un prorroguismo, hasta febrero del 2010, de un año y seis meses.
El martes 19 de abril, un grupo de gremialistas encabezados por Illanes logró, en un segundo intento, desalojar de la sede sindical, ubicada en el edificio de la Central Obrera Regional (COR), a Braulio Rocha, que se había encerrado en ese ambiente. En la evacuación participó la Policía.
El lunes 26, Braulio Rocha convocó a un ampliado ordinario en instalaciones del Multifuncional, en el que participaron el alcalde Édgar Patana (MAS) y el presidente del Concejo Municipal, Zacarías Maquera (MAS).
En ese encuentro, en el que según Rocha participaron 400 organizaciones, éste fue ratificado como dirigente por otros tres años, es decir hasta el 2014. Inmediatamente, se trasladaron a la sede gremial y la retomaron sin oposición.
Pero al día siguiente, el martes 27, el grupo de Illanes desalojó la sede de manera violenta, causando destrozos en las rejas del edificio, las puertas, ventanas y muebles. Además, se prendió fuego a los documentos que fueron extraídos de esos ambientes.
Para Illanes, fue la expresión de la rabia que sienten los gremiales porque Rocha pretende prorrogarse una vez más con un ampliado, supuestamente amañado, con credenciales de dirigentes repartidas a comerciantes de base, y en el que —según él— sólo habrían participado 50 organizaciones.
Desierta. «No vamos a permitir que Rocha retorne. En un ampliado hemos decidido estar en movilización permanente, con estrategias que nos reservamos. Pero no vamos a permitir que este dirigente corrupto retorne», sentenció Henry Illanes. Ayer, las oficinas de la Federación de Gremiales estaban desiertas y con la custodia de unos 12 policías. «Hasta los ratones han huido», comentó uno de ellos.
Braulio Rocha no quiso entrevistarse con La Razón y por teléfono anunció que prepara una querella en contra de Henry Illanes, Darío Jiménez y Santos Ticona. «Es hora se sentarles la mano. Es la única forma», indicó y añadió que su grupo no intentará retomar la sede sindical hasta que obtenga una ratificación oficial a cargo del Ministerio de Trabajo y de organizaciones como la Central Obrera Boliviana (COB).
Por su parte, Illanes minimizó la amenaza de Rocha y anunció que presentará una querella en contra del dirigente que tiene respaldo del Alcalde de El Alto. «Lo voy a demandar por actos de corrupción», sentenció.
Los daños en edificio sindical
Las rejas de ingreso fueron arrancadas, incluso se desmoronó el muro de un metro de alto que lo soportaba. Las ventanas de los tres pisos del inmueble están rotas. La puerta de la sede de la Federación de Gremiales está arrancada. Se ven papeles semiquemados botados en el atrio de la sede. Éstos son algunos de los destrozos que sufrió la sede sindical de los gremiales por la pugna entre los dirigentes de este rubro.
Dirigente Rocha amenaza a medios de comunicación
El dirigente gremial Braulio Rocha, que intenta mantenerse como cabeza del sector, amenazó ayer a los medios de comunicación con procesos penales si es que continúan, según sus palabras, «tergiversando» las informaciones referidas al conflicto gremial y sus declaraciones.
Cuando este medio de comunicación pidió una entrevista, simplemente dijo: «Voy a presentar una demanda en contra de ese maleante (en referencia a Henry Illanes), y haré lo mismo contra los medios de comunicación porque tergiversan la información y mis declaraciones».
El dirigente comentó que le molesta que se mezcle lo político con lo sindical, respecto a la participación del alcalde Édgar Patana, militante del MAS, en el ampliado ordinario de la federación de gremiales realizado el lunes 25. «Él fue un invitado de honor».
Luego aseguró que los embates de Illanes son un ataque al «proceso de cambio, que encabeza el hermano Evo».
Los uniformados reportan y piden ayuda a civiles
Los uniformados policiales que custodian el edificio de la Central Obrera Regional (COR) y de la Federación de Gremiales de El Alto pidieron ayer colaboración a una civil, que aguardaba en la esquina de la calle 2, a media cuadra de ese inmueble.
Cerca a las 10.00, los uniformados se mostraron preocupados por una posible incursión de gremiales del bando de Illanes. Uno de ellos se dirigió hasta esa esquina, donde se encontró con una señora de manta celeste y pollera azul que estaba con otras cinco personas. Le dijo: «Sólo somos 14, qué pasa si vienen. No vamos a poder hacer nada».
Ella respondió: «Sí, ahora llamo». Y marcó un número y habló: «Dice que hace falta policías, que son pocos…». A los pocos minutos, un contingente de la PAC, unos cinco policías en motos, llegó al lugar a colaborar a los que custodiaban la sede sindical. Al verlos, la señora y sus acompañantes se marcharon.