«No podemos quitonearnos los cadáveres, ¡por favor! Lo que necesitamos es que la gente cumpla la norma, que siga el cronograma. Hemos dado el plazo de un mes adicional, es decir que la gente tiene todo ese tiempo para pedirle al Gobierno Municipal que haga la exhumación. No lo hagan con sus propias manos», declaró.
Añadió además que la exhumación se debe hacer de forma ordenada y cumpliendo el cronograma. Ayer, este diario publicó una nota que reseña cómo familias rescataban con sus propios medios los restos de sus difuntos ante la mirada de agentes de la Guardia Municipal, desplazada en el lugar, que no tomaron ninguna acción para evitarlo.
El 4 de abril, la Oficialía de Promoción Económica anunció la vigilancia permanente del camposanto destruido por el megadeslizamiento, para evitar, precisamente, que «familiares o personas inescrupulosas realicen excavaciones sin autorización edil».
Ayer, Revilla dijo que «la Guardia Municipal está ahí para hacer el resguardo» y luego aclaró que la función de este personal no es ayudar a quienes excavaban con picos, palas y manos. La nota periodística menciona que los 10 guardias que estaban en el lugar no hicieron cumplir la prohibición de desenterrar a los muertos con las manos, como lo anunció la Oficialía de Promoción Económica.