Afectados planean quedarse en área pública de Irpavi
Determinación. No quieren ir a El Alto; demandan quedarse en La Paz
«El megadeslizamiento es un pretexto para que los comunarios de Callapa Aruntaya ingresen en nuestras áreas de equipamiento disfrazados de damnificados» denunció a La Razón una vecina de la Urbanización Flor de Irpavi, quien pidió se guarde en reserva su nombre porque teme ser hostigada por los afectados del 26 de febrero.
«No todos los que están en las carpas son damnificados, son comunarios y nosotros los conocemos con nombres y apellidos, pero nos tienen atemorizados», aseveró la propietaria.
La concejal Denisse Ostermann, secretaria de la Comisión de Planificación y Gestión Territorial, informó que desde el 2007 los comunarios buscaron tomar los predios con una serie de excusas, y ahora se teme que los damnificados no salgan del lugar que es propiedad de la Alcaldía.
Esta situación fue admitida por Carmen Pacheco, vice presidenta de los damnificados del sector seis de Callapa, quien aseguró que sólo tienen dos posibilidades: retornar a sus terrenos, que están siendo terraceados en la actualidad con maquinaria pesada, o quedarse en los predios donde están instaladas las carpas temporales.
«Sería mejor que nos quedemos aquí porque nuestros terrenos (en Callapa) no son seguros, se sigue rajando. Aquí nos podrían dar aunque sea a un pedacito para que construyamos una casita a media aguas», expresó.
En tanto, Ostermann recordó que la comuna no tiene predios para ofrecer a los damnificados y que el compromiso del presidente Evo Morales fue el de ayudarlos con la construcción de viviendas sociales en El Alto
Pero, los afectados rechazan rotundamente la posibilidad de ir a vivir a El Alto en las viviendas que el Gobierno pretender construir en el distrito ocho de esta ciudad.
«No, no iremos al El Alto, hace mucho frío. Estamos acostumbrados a vivir aquí y vamos a pedir una audiencia con el alcalde Luis Revilla para que nos entreguen terrenos en este sector, no importa a 50 metritos por damnificado,» declaró Genara Salcedo secretaria de Hacienda de los afectados de Callapa del sector seis.
El área de equipamiento de la Urbanización Flor de Irpavi tiene una superficie de tres mil metros, que está destinada según los vecinos para la construcción de una cancha multifuncional y la plaza principal de la zona, obras que no fueron consolidadas porque desde el 2007 los comunarios pretenden apropiarse de estos predios.
«Venían con bolsas de cal y se lo han parcelado, nosotros hemos pedido a la Alcaldía que los detengan y existieron enfrentamientos», relató el propietario de una vivienda.
En dos oportunidades, la comuna trató de trasladar a los afectados que están ocupando las áreas de equipamiento de la zona Flor de Irpavi a las instalaciones del Colegio Militar. En dicho espacio se les ofrece todos los servicios básicos y mayor comodidad, » Pero ellos se negaron a ser traslados porque quieren quedarse aquí, esa es su intención», aseguraron los denunciantes de la zona.
Comunarios piden dinero
Los propietarios de las casas de la zona Flor de Irpavi denunciaron que durante el 2001 los comunarios de Aruntaya identificaron los terrenos baldíos de la urbanización, predios que tenían dueños pero no estaban construidos y para que se pudiera edificar las viviendas exigieron el pago de dinero, como un «derecho de piso», lo que es de cocimiento de la Alcaldía. Las mismas autoridades recomendaron que se realice la cancelación para evitar conflictos, según los vecinos.
Exigen casas prefabricadas
Cerca de 300 familias damnificadas del megadeslizamiento que están en los campamentos, Tierra de Dios, la ex Chancadora y Flor de Irpavi aún viven en carpas y viviendas improvisadas con calaminas y cartones por lo que esperan beneficiarse con casas prefabricadas.
«Hace mucho frío, nuestros hijos están enfermos, necesitamos que nos den las viviendas prefabricadas», expresó Félix Ayala, representante del campamento ex Chancadora.
Mientras que los afectados de Flor de Irpavi están divididos, un grupo pide que las casas prefabricadas sean instaladas en los terrenos que se deslizaron en febrero y otros exigen que sean implementadas en las áreas de equipamiento, donde actualmente tienen sus carpas. «Nuestro presidente de la zona instruyó que se levante un listado para las casas prefabricadas en Callapa, pero algunos vecinos no quieren, dicen cómo vamos a ir allá y ese barranco se va caer. Aquí no más nos quedaremos», revelaron.
Los vecinos de Flor de Irpavi temen que al instalar las viviendas prefabricadas se legitimaría su demanda.