El coronel Gróver Zapata, director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), informó que la ametralladora, incautada el miércoles en la localidad de Locotal, fue enviada desde Santa Cruz y que su destino final era Cochabamba.
Según la autoridad de la fuerza anticrimen, el arma habría ingresado al territorio nacional para ser usada en un atraco violento a una entidad financiera.
Riesgo. «Sabemos que algunos elementos de nacionalidad peruana con otros connacionales provenientes de Santa Cruz se encontrarían en la ciudad y tendrían que haber cometido este delito», dijo el jefe policial, quien comunicó que el Comando Departamental ejecuta operativos para evitar que se consume el atraco.
«Aprovechamos la ocasión para alertar a todas las entidades financieras y otras que manejan valores y dinero, que tengan los debidos cuidados», alertó Zapata. El arma es de última generación, cuenta con un silenciador y un cargador que alimenta la ametralladora con 30 proyectiles.
«Es una ametralladora de fabricación israelí, mini USI, con cargador y un silenciador; es un arma sofisticada», expresó el capitán Juan Carlos Corrales, jefe de la División Propiedades de la FELCC.
El jefe policial anticipó que un eventual enfrentamiento entre efectivos del orden y antisociales que porten este tipo de armamento pondría a los uniformados en desventaja. «Estamos viendo esto alarmados, ya que no se utiliza en la Policía este tipo de armas».
Dentro de la Policía Boliviana, sólo la brigada especial de reacción rápida Delta, está equipada con este tipo de armamento.
La FELCC Cochabamba coordina e intercambia información con sus similares de La Paz y Santa Cruz para dar con los autores del envío y con los receptores. El caso está en proceso de investigación y la Policía sigue la pista de quiénes estaban preparando un atraco en Cercado.