Cocarico acusó a Revilla de poner trabas a los actos debido a que está resentido con el vicepresidente Álvaro García Linera, quien izará la wiphala ese día. A su turno, Revilla expresó su desconfianza en la propuesta verbal del Gobernador para que ese día se instalen dos mástiles a fin de que ambos icen una bandera de La Paz.
«No veo inconveniente en que se instale un mástil más. Espero que se mande una nota, porque de lo contrario existiría la susceptibilidad de que puedan ocurrir sorpresas el día del acto», declaró el burgomaestre.
Un día antes, Cocarico descartó la posibilidad de enviar la nota que pide el Alcalde y ayer señaló que el motivo de sus cuestionamientos es que se encuentra resentido con García Linera.
» Parece que esta idea de que participe el Vicepresidente no le gusta al Alcalde. Eso es un problema personal que debe haber (…). Esto de nuestra parte no tiene problema y que (el Alcalde) se haga pasar el resentimiento que tiene», declaró ayer al programa El Mañanero.
Cocarico insistió que los cambios y la propuesta de la instalación de un cuarto mástil para abrir espacio a la participación de García Linera fue informada a Revilla. No obstante, el Alcalde insistió en que espera una nota formal antes del día del aniversario.