Campesinos e indígenas, en pugna por tierras
Saneamiento. La titulación de tierras favoreció más a los pueblos indígenas
Aunque dejó en claro que los campesinos respetan cada centímetro de tierra titulada en favor de los indígenas, el ejecutivo de la Confederación de Trabajadores Campesinos, Roberto Coraite, expresó el malestar de su sector, que se siente postergado en el proceso de saneamiento y titulación de tierras fiscales.
«En el occidente hay gente que no pasa de tener media o cuarta hectárea de tierra, eso significa que requerimos nuevos asentamientos para nosotros», aseveró. El campesinado plantea cambiar la Ley INRA por otra que les permita acceder a la tierra de manera expedita; primero el asentamiento y luego la regularización.
Desde 2006, según admitió el ministro de la Presidencia, Carlos Romero, el proceso de saneamiento benefició con 15 millones de hectáreas a 100 mil indígenas de tierras bajas, «a razón de 150 hectáreas por persona», con la consolidación de las Tierras Comunitarias de Origen (TCO).
Se estima que en Bolivia hay cerca de tres millones de campesinos originarios e indígenas, 90% en tierras altas y valles y el resto, en tierras bajas, es decir indígenas.
Diversos episodios de reciente data marcan el distanciamiento entre ambos sectores. Por ejemplo, en octubre del 2010, indígenas lecos y campesinos del norte paceño estuvieron a punto de enfrentarse en Apolo cuando los primeros pretendieron espacios de la TCO Leco.
La pugna más reciente tiene que ver con el territorio del TIPNIS, por donde se prevé la construcción de la carretera que unirá Villa Tunari con San Ignacio de Moxos.
Adolfo Chávez, máximo ejecutivo de los indígenas, dijo que además del daño que la obra podría causar a la naturaleza, «el temor es a los asentamientos organizados en sindicatos»; aludió así a grupos de colonizadores llegados del Chapare a esa región.
Para el director de la Fundación Tierra, Gonzalo Colque, la cadena de conflictos en el transcurso de los últimos dos años tiene que ver con la titulación de las TCO.
«Este avance fue más notorio y evidente para los indígenas y lo que hay es una especie de celo y reacción de parte de los campesinos pues, según ellos, en sus territorios no se habría avanzado en la titulación de tierras en la misma magnitud; arguyen que no tienen iguales oportunidades de acceso a las tierras fiscales como en el caso de los indígenas y esto derivó, por ahora, en una confrontación de discursos. Los campesinos dicen que los indígenas serían los nuevos latifundistas del país», analizó Colque.
El campesinado es, junto a cocaleros y colonizadores, el instrumento para la consolidación del cambio que promueve el gobierno de Evo Morales. En junio del 2010, cuando indígenas anunciaron una marcha en demanda de una Ley de Autonomías que recoja sus aspiraciones, campesinos amenazaron con intervenirla.
Hoy el Ejecutivo ha ofrecido la reconducción del proceso agrario para dotar de tierras fiscales a este sector.
Las salidas propuestas por Colque
Análisis
De acuerdo con Gonzalo Colque, la solución a las diferencias entre indígenas y campesinos pasa porque el Gobierno garantice el cumplimiento de las leyes, es decir evite la ocupación de tierras saneadas, que respete el derecho de la consulta y que los campesinos estén impedidos de solicitar la anulación de los títulos de las TCO. El especialista sugiere, además, que campesinos e indígenas propongan, discutan y acuerden un plan de asentamientos humanos.
Evo entregará 18.858 títulos y diversos decretos
En una concentración que se prevé será masiva, el presidente Evo Morales entregará hoy en Villa Tunari un paquete de 18.858 títulos ejecutoriales, al menos cuatro decretos para la aplicación de la Ley de la Revolución Productiva Comunitaria y recursos para 60 municipios de extrema pobreza azotados por los desastres naturales.
El viceministro de Desarrollo Productivo, Víctor Hugo Vásquez, informó que el objetivo de los cuatro decretos es «aumentar la producción agrícola para que a las futuras generaciones de bolivianos no les falte el alimento».
Con relación al decreto sobre el Seguro Agrícola, explicó que, en su primera etapa, éste beneficiará a 60 municipios de los valles y el altiplano afectados por heladas, granizo o sequía. «Para esta fase habrá un requerimiento económico de 24 millones de dólares para asegurar más de 160.000 hectáreas de tierra cultivada», indicó.
Por otra parte, el INRA adelantó que del total de 18.658 títulos ejecutoriales a entregar, 7.815 pertenecen a sindicatos y comunidades de la provincia Chapare.
El ejecutivo de la Federación de Campesinos de Cochabamba, Manuel Mamani, informó que organizaciones sindicales campesinas, indígenas y originarias de todo el país se concentran en Villa Tunari, donde celebrarán el «Día de la Revolución Productiva Comunitaria», denominado así porque se espera la promulgación del decreto reglamentario de la ley.
Mamani confirmó la presencia de al menos 10 mil personas en el estadio de esa localidad, desde las 11.00. «Será importante, porque el día 2 de agosto ya no se llamará más Día del Indio, sino Día de la Revolución Agraria, en homenaje a nuestros ancestros».
Cambios al 2 de agosto en Bolivia
Día del indio
Gobierno de Germán Busch
-El expresidente Germán Busch instituyó, el 2 de agosto de 1937, la celebración del «Día del Indio» en honor a la fundación del primer núcleo de educación indigenal en Warisata.
Reforma Agraria
Gob. de Víctor Paz Estenssoro
-En 1953, en Ucureña (Cochabamba), se aprueba la Reforma Agraria que cambia la distribución de la tierra bajo el lema de que ésta es para quien la trabaja.
Nueva nomenclatura
Gobierno de Evo Morales
-El 2009, el actual Gobierno decidió llamar al 2 de agosto «Día del Indio y la Interculturalidad»; el 2010, «Día de los Pueblos Originarios»; y este 2011, «Día de la Revolución Agraria».